A Ivonne Reyes ya no le afecta lo que Pepe Navarro pueda decir o pensar de ella. Tras una nueva vista que se ha producido por el juicio sobre la presunta paternidad del presentador del hijo de Ivonne, Alejandro Reyes, Pepe no se ha quedado callado y ha declarado la guerra absoluta a la venezolana. Sin embargo, sabemos que sus declaraciones seguramente le entren por un oído y le salgan por el otro, pues su nueva faceta que ya ha convertido en su profesión le brinda unas buenas energías que logran superponerse a todo lo malo que venga a su vida, lo cual dice adiós sin ni siquiera despeinarse. Sigue leyendo y quédate con nosotros para descubrir cómo Ivonne ha conseguido sacar su lado más zen ante las adversidades. Te contamos todos los detalles a continuación
El contrapunto que divide a Ivonne Reyes y a Pepe
> Ya lo veníamos diciendo, Ivonne está en un punto en el que ha tenido que dar un cambio radical a su vida para ser feliz. Podéis imaginar hasta dónde tuvo que llegar para tirarlo todo por la borda y dar este giro de guion. Que cuestionaran a su hijo Alejandro, no le hacía ningún bien, ella solo quiso ser buena madre y demostrar su verdad, aunque esta en realidad deberá demostrarse con la justicia tal y como sentencia Pepe Navarro.
Tuvo que recurrir renovarse, a estar más calmada, a llegar a su lado más tranquilo, a vivir el momento presente sin pensar en el mañana. Tuvo que hacer un cambio en sus circunstancias por la situación que vivía. Mientras, paradojas de la vida, Pepe Navarro está cansado, cabreado, harto de esta historia y lo único que quiere es que se demuestre la verdad más absoluta. Que según él, él no es el padre de ese chico.
