Los miembros de la familia real viven tiempos revueltos. Cada vez están más alejados unos de otros. Cierto es que doña Sofía está poniendo toda la carne en el asador para ayudar a don Felipe a salvar la monarquía. De ahí que se multiplique porque sabe que su presencia suma a la causa. No obstante, a Letizia, ni agua. Es más, siempre que puede, se la devuelve, como ocurrió recientemente en la que ha sido considerada como la boda del año.
7La reina se salta las normas
Doña Letizia recibió la consigna de no dejarse ver en público junto a Marichalar. Sin embargo, no ha cortado el contacto. Hablan con frecuencia por teléfono e intercambian confidencias. La reina ha sido el paño de lágrimas de Jaime en los momentos más complicados tras su divorcio de Elena. Se comenta que cuando telefoneaba para hablar con sus hijos, todo eran excusas para no pasar la llamada a Victoria Federica y Froilán.
Por su parte, doña Letizia encontró un gran apoyo en Jaime cuando su hermana Erika falleció. Aquello sumió a la reina en un profundo dolor. Se preguntaba con frecuencia si podría haber hecho algo para evitar tan trágico suceso. Se temió seriamente que la pena afectara al embarazo de su segunda hija. Estaba de seis meses cuando la tragedia se cebó con los Ortiz-Rocasolano.
