Raquel Mosquera es el mayor descubrimiento que nos ha dado Supervivientes. Ha estado nominada casi todas las semanas porque sus compañeros la veían un blanco fácil. Pero ahora es una finalista en toda regla. Ha luchado, ha trabajado y ha conseguido llegar hasta el final del programa por su sinceridad y naturalidad. Así ha conseguido meterse al público en el bolsillo. Pero la vida de Raquel no ha sido fácil. Repasamos los difíciles momentos por los que ha tenido que atravesar la peluquera.
42008 un año bastante duro para Raquel Mosquera
En 2008 Raquel era ingresada en el en el hospital Puerta de Hierro, donde fue atendida de varios cortes «superficiales» en las muñecas y de ingesta de barbitúricos. Días anteriores había estado hospitalizada varias veces en la Clínica López Ibor, por varias crisis de ansiedad. Raquel no pasaba por su mejor momento y parece que no se recuperó por la depresión que le causó el fallecimiento de su marido Pedro Carrasco. Tras su divorcio con Tony, la peluquera se habría encontrado con un cúmulo de circunstancias à las que no sabría como enfrentarse. Después de permanecer el periodo impuesto, Raquel salió de la Clínica recuperada.
