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Chester: La desaparición mediática de Alba Carrillo tiene un porqué

Parece que Alba Carrillo está de vuelta y no. Todo lo contrario. Está más desaparecida que nunca. Su entrevista en el ‘Chester’ de Risto Mejide y sus apariciones en ‘Mujeres, hombres y viceversa’ de la mano de su madre, Lucía Pariente, son programas grabados con anterioridad.

Habitual de los platós de televisión y las revistas del corazón por voluntad propio, hoy Alba toma otro camino, pero, ¿dónde está? ¿Por qué ha desaparecido la chica del momento?

Su entrevista en Chester

Alba Carrillo

Alba Carrillo se ha sentado este domingo en el programa ‘Chester’, presentado por Risto Mejide. Si bien es cierto, el formato en el que estaba incluido el perfil de Alba se grabó el pasado mes de septiembre, pese a haber sido emitido en enero. ‘Beauty’, como concepto españolizado de ‘belleza’. ¿Qué hay detrás de una mujer bella? La modelo, en su sincera conversación con Mejide, ha expresado sus miedos.

«Cuando tengo miedo, me hago la rubia tonta. He estado cómoda en ese papel», comentaba con el publicista, que ha confesado, por fin, que es licenciado en Dirección y Administración de Empresas. Llegó a ser modelo de casualidad. Su madre quería que estudiase una carrera y ella, que ha confesado sacar siempre muy buenas notas, prometió a unas amigas que se presentaría al casting de ‘Supermodelo’ si aprobaba los finales de la Universidad.

No se ha cortado un pelo en hablar del complicado mundo de la moda, sus utopías y sus estigmas. «Menos mal que tenía las ideas muy claras y sabía que la carrera era lo primero porque lo que me decían no era normal«, empezaba diciendo. «Existe una doble moral terrible. Por ejemplo, para la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid piden un peso determinado. Si lo das, no cabes en la ropa de los diseñadores. Así que adelgazas, pero te ponen pesas en los sujetadores o te hacen beber dos litros de agua antes de pesarte y pasar la prueba. Pesas más de lo que tú pesas totalmente, pero es solo una incoherencia más de ese mundo. La moda es todo fachada. Hay que levantar alfombras, hay mucha mierda ahí metida«.