Jesulín de Ubrique vuelve al centro de la polémica. El que fuera el torero más famoso de España, ha tomado la justicia por su mano y ha impedido, a la fuerza, que un equipo del programa de María Patiño, ‘Socialité’, grabe a las puertas de su casa.
Según informaba la presentadora, la casa que Jesús y María José comparten en la urbanización Los Arcos Gardens no es una propiedad privada sino que es un callejón público certificado por el plan urbanístico del ayuntamiento de Arcos de la Frontera.
La guerra contra la prensa
Las espadas están en alto. Y no es la primera vez. El matrimonio Janeiro-Campanario vuelven a estar a la gresca contra los medios de comunicación. Concretamente contra Telecinco y el equipo de periodistas del corazón que conforman la cadena grande de Mediaset España.
Hace apenas unos días ‘Cotilleo’ publicaba en exclusiva que María José Campanario había interpuesto tres demandas: una contra Kiko Hernández, otra contra el reportero José Antonio León y otra contra La Fábrica de la Tele y Telecinco. A esas tres, se suma uno nuevo frente.
«A ver quién pone mejor la denuncia»
El reportero alega que Jesulín se abalanzó sobre ellos ante la mirada de un guardia de seguridad de la urbanización, que se quedó impasible. Supuestamente, dos jardineros también contribuyeron al forcejeo para que el torero consiguiese hacerse con la cámara, valorada en algo más de 7.000 euros y que finalmente quedó destrozada.
A continuación, ambas partes acudieron a la Guardia Civil e intercambiaron denunciar. Tras presentar la demanda con el correspondiente parte de lesiones, llamaron a los aludidos a declarar. Esto es, a Jesús Janeiro como presunto autor de un delito de lesiones, y a María José como testigo. El matrimonio no denunciaron ser víctimas de una agresión pero según el periodista, Campanario apuntó: «A ver quién pone la mejor denuncia«.
Jesulín Versus Prensa
No es la primera vez que Jesulín de Ubrique se toma la justicia por su mano contra los medios de comunicación. El diestro sostiene que él solo habla en una revista en concreto. Su publicación de cabecera y donde le pagan «un pastón» (palabras textuales) cada vez que relata obra y milagro sobre su vida privada, enseña su casa, o explica cómo se encuentra de salud, por ejemplo, tras las supuestas arritmias que sufrió el pasado mes de agosto.
En el año 2004, a las puertas de su casa de El Bosque, ante las preguntas y la presencia de los cámaras de algunas agencias de prensa, Jesús se enzarza en una monumental pelea física contra uno de los reporteros gráficos. La crudeza de las imágenes de este pasado fin de semana recuerdan, sin lugar a duda, lo ya vivido 13 años atrás.
Jesulín, guerra en ‘Ambiciones’
«Apaga la cámara. La próxima vez, os tiro el coche encima. A mí me da igual. Os atropello. Lo tengo asegurado, es un accidente y ya está. Lo siento mucho. Voy a ir a haceros daño y a joder», comentaba Jesulín de Ubrique en las puertas de su finca ‘Ambiciones’. Cabe recordar que en todas estas ocasiones los reporteros de prensa estaban desempeñando su trabajo en la vía pública. En ningún caso se invadía una propiedad privada, ni el terreno vedado de la finca.
Según la propia María Patiño, estas son las formas habituales en las que funciona Jesulín de Ubrique teniendo en cuenta su propia experiencia como reportera a las puertas de la finca Ambiciones y en los alrededores de Ubrique y la Sierra de Cádiz.
Jesulín de Ubrique Versus ‘Sálvame’
No hay mejor defensa que un buen ataque. Aunque en este caso, vuelve a ser absolutamente injustificado. Aún peor, la pasividad de Jesús ante la delicada situación que vivió el reportero Omar Suárez contra María José Campanario y su padre, Pepe, quien tachó a Jorge Javier Vázquez de ‘gay, hijoputa’, mientras que su hija llamaba al periodista ‘gilipollas’ y ‘basura’.
Pero la peor parte llegó cuando Pepe Campanario, desde el asiento del copiloto mientras su yerno Jesús conducía, se refería Belén Esteban como «la de la nariz ‘toa’ comía», haciendo alusión directa a la adicción de la colaboradora a la cocaína. Una actitud que Jesús no reprendió pese a tratarse de la madre de su primera hija.
Su peor año
El matrimonio compuesto por Jesulín de Ubrique y María José Campanario ha atravesado un año 2017 más convulso que tranquilo. Todo empezó con la publicación en exclusiva de su «re-boda» por los 15 años que de casado que cumplieron el pasado 27 de julio. Apenas unas semanas después, María José Campanario frenaba tal acontecimiento debido a la enfermedad que padece: fibromialgia.
El verano más complicado de su vida se torció con el ingreso hospitalario de la esposa del torero en la clínica psiquiátrica El Seranil. La imagen de María José cambiaba por completo, no solo físicamente sino incluso en su forma de hablar. A golpe de talonario y exclusiva, la pareja no ha dejado de contar sus aventuras personales e incluso clínicas. Mientras que la Campanario se recuperaba de lo suyo, Jesús sufría ‘arritmias’, también contadas a través de periodistas amigos. En su publicación de cabecera quitó hierro al asunto y habló de ‘un golpe de calor’: «De repente sentí el cuello y los músculos totalmente rígidos y me asfixiaba… Aun así llegué hasta la enfermería por mi propio pie», confesaba el de Ubrique.
2017 ha sido un año negativo para su salud, y positivo para su cuenta bancaria teniendo en cuenta el grueso de las exclusivas que el matrimonio ha concedido. Ahora la pareja cierra el año con un nuevo enfrentamiento contra la prensa. Y lo que queda.