La tormenta no amaina entre los miembros de la familia real. La misma está compuesta por don Felipe, doña Letizia, doña Sofía, la princesa Leonor y la infanta Sofía. Es la reina emérita la única que se mantiene en el cargo y activa. El resto, han sido fulminados por el rey con el inestimable apoyo de la reina. Pues bien, la posición de doña Sofía es muy complicada. Seguir en activo significa recibir desprecios. El último ha sorprendido. Otra vez Letizia la ha tomado con ella. ¿Qué ha pasado? Te lo contamos todo a continuación.
¡Doña Sofía ya no puede más!
> Doña Sofía está muy molesta por el ostracismo al que fue condenado su marido a propósito de la última edición de los Premios Princesa de Asturias. En la misma todo el protagonismo recayó en la princesa Leonor, que se desenvolvió con gran soltura. Pues bien, mientras la familia de doña Letizia tuvo gran protagonismo, ni rastro de don Juan Carlos o la infanta Elena. Contrastó la visibilidad de los Ortiz-Rocasolano frente a la ausencia de los Borbón.
Lo cierto es que doña Sofía no ve bien que no se invitara a don Juan Carlos. Cree que eso es no reconocer la realidad de su gestión como monarca desde que subiera al trono. Lo considera un grave error histórico. Por otro lado, tampoco entiende la reina que se haya dejado fuera a la infanta Elena. Todo esto no hace más que mostrar de cara a la galería que la desunión es total.
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Nueva humillación a doña Sofía
> A doña Sofía le ha tocado sufrir una nueva humillación. Es público y notorio que Letizia no la traga. Pues, bien, parece que don Felipe se ha propuesto que su esposa sea aceptada y de ahí que quiera que recoja el testigo de todos los actos a los que solía acudir doña Sofía. La cuestión es que la reina se ha negado, durante años, ha asistir al rastrillo de Nuevo Futuro que organiza la infanta Pilar. Sorprendentemente, en esta nueva edición sí acudirá. Eso sí, junto a doña Sofía.
Una vez más, doña Sofía tendrá que ponerse la máscara y aparentar cordialidad junto a su nuera. Sin embargo, la procesión va por dentro. La forma de ejercer de Letizia no va con ella. Además, está cansada de feos y malas caras. Y, como madre, no perdona el ensañamiento que su nuera tiene con sus hijas y nietos. De todo esto también culpa a su hijo, a quien no reconoce en sus actitudes familiares.
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La venganza de Letizia
> Doña Letizia tiene claro que ella debe ser la titular en actos que siempre han estado muy ligados a doña Sofía. Ocurrió este año en Las Edades del Hombre, a cuyas exposiciones ha acudido la madre de don Felipe año tras año. La mezcla cultural y religiosa de la muestra ha seducido a doña Sofía desde sus inicios. Han sido muchas las ediciones en las que ha estado presente. En algunas, acompañada por don Juan Carlos.
Ciertamente, todo indica que fue idea de doña Letizia inaugurar la edición número veinticuatro de Las edades del hombre. Es natural que se produzca el relevo entre reinas. De hecho, han sido varias las tareas que antes llevaba doña Sofía y que han pasado a doña Letizia. Sin embargo, se antoja innecesario en lo referente a esta exposición. Todo hace pensar que la madre de don Felipe está dolida con este inesperado relevo.
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Doña Sofía, la gran sufridora de Zarzuela
> Doña Sofía lleva mucho aguantado desde que se casara con don Juan Carlos. Nada más regresar de la luna de miel, empezaron los rumores de separación. De hecho, el gobierno griego empezó a dar muestras de preocupación por lo que ocurriría con la dote aportada por parte de la novia en caso de ruptura. Desde entonces, hasta ahora, la reina emérita no ha hecho más que sufrir. Don Juan Carlos no la ha respetado y eso ha quedado patente hasta públicamente.
En el otoño de su vida, doña Sofía no puede estar tranquila. Todo sería más fácil si doña Letizia pusiera algo de su parte. Sin embargo, no está por la labor, eso hace que la relación también se haya resentido con don Felipe. En cuanto a Leonor y Sofía, apenas las ve. Parece que las niñas solo tienen una abuela, Paloma Rocasolano, la omnipresente madre de la reina. Recientemente se ha confirmado que los reyes eméritos solo ven a sus nietas en actos oficiales. Sin duda, sorprendente.