Todos sabemos que la televisión genera mucho dinero. Entrevistas, concursos, colaboraciones, publicidad, todo ello hace que nuestros famosos enriquezcan sus cuentas bancarias de una forma relativamente fácil. Por ejemplo, Terelu Campos cobra 500 euros cada vez que participa en el programa Viva la vida y Loles León era la actriz mejor pagada de la serie Aquí no hay quien viva. Si no se hubieran encontrado con ningún obstáculo en su carrera profesional, todos ellos deberían tener un buen colchón económico. Pero, el nivel de vida que llevan o los problemas que han mantenido con el Fisco han hecho que tengan muchas dificultades para llegar a fin de mes. ¿Quieres saber qué famosos han perdido su fortuna por su mala cabeza?
La familia Campos, al borde de la quiebra
> María Teresa Campos era la reina de las tardes de Telecinco. El sueldo de presentadora de Día a Día era similar al de muchos futbolistas. Durante aquella época llegó a cobrar seis millones de euros al año. Una cantidad suficiente para que su familia forjara un nivel de vida que no han podido mantener a lo largo del tiempo. Las excentricidades del clan han vaciado sus cuentas tan rápido como se llenaron. Terelu pensó que su puesto de presentadora de Sálvame Deluxe sería eterno, así que compró un ático valorado en más de un millón de euros. Sin embargo, la pérdida de su puesto de trabajo y su ritmo de gastos, han hecho que tenga que hipotecarlo hasta en cuatro ocasiones. Finalmente, ha tenido que vender la vivienda y trasladarse a otra más austera. También prescindió del chófer y del servicio doméstico.
Situación similar vive la matriarca de la familia. María Teresa está desesperada por vender su vivienda de lujo en Las Rozas. La mansión genera unos gastos a los que ya no puede hacer frente. Lo que le ha llevado a vender muchos de sus valiosos muebles y a inhabilitar parte del espacio. Su ruina se debe a una gran deuda contraída con Hacienda. La periodista tiene que pagar 700.00 euros y su falta de trabajo le genera muchos problemas para hacer frente a la misma. Por su parte, la hija pequeña del clan, Carmen Borrego, tampoco pasa por su mejor momento económico. A pesar de estar acostumbrada a llevar una vida más austera, también ha tenido que reducir sus gastos. El motivo es la falta de trabajo. Antes de saltar a la fama era directora de programas, pero, después de salir a la luz mediática, ninguna productora encuentra un proyecto que encaje con ella.
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La mala suerte del clan Flores
> Lola Flores, conocida como La Faraona, es una de las artistas que han marcado historia. Debería haber generado un patrimonio similar al de otros cantantes como Rocío Jurado o Julio Iglesias, pero, la mala administración y sus consecuentes problemas con Hacienda, la llevaron a tener que pedir dinero a su público para pagar sus deudas. En 1987, la Fiscalía le condenó a pagar una multa de 96 millones de pesetas y a indemnizar al Estado con otros 52 millones. “No tengo ni idea de números, no sabía que había que pagar”, decía la artista intentando justificarse. Finalmente, pudo librarse de gran parte del castigo que le impusieron inicialmente. Pero, la mala fama que se ganó hizo que se redujeran sus ingresos y tuviera muchos problemas para pagar los 30 millones que la impusieron. Tan es así que sus hijos tuvieron que renunciar a la herencia porque estaba plagada de deudas.
Al no poder heredar ningún montante económico, su hija Lolita comenzó su patrimonio desde cero. Lo cierto es que empezó teniendo bastante suerte. Cantaba, actuaba e incluso era propietaria de algún negocio. Pero todo se torció cuando dejaron de contratarla y su tienda de ropa dejó de tener éxito. Esta empresa generó una deuda que provocó muchos problemas en la economía de Lolita. “No tengo nada ahorrado, siempre he vivido al día”, comentaba. La tienda dejó de vender, y ella no pudo hacer frente a los pagos de los proveedores. Aquello le llevó a pedir dinero a familiares y amigos.
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La multa de Hacienda de Bibiana Fernádez y Loles León
> “Hacienda me lo ha quitado todo”, comentaba Bibiana Fernández en 2019. La actriz poseía una lujosa vivienda en Boadilla del Monte que tuvo que vender a sus amigos Alaska y Mario para hacer frente a sus deudas. “Las leyes no son justas. Así es imposible que pague”, decía al hablar de sus problemas económicos. A Bibiana le embargaron gran parte de su sueldo, por lo que no podía hacer frente a la multa y a sus gastos mensuales. De esta manera, Hacienda incrementó su sanción y, con ello, el porcentaje que se llevaba de su salario. Asfixiada, tuvo que mudarse a un pequeño piso del centro de Madrid y dejar atrás el fruto de su carrera profesional.
Loles León también tuvo problemas con el pago de sus impuestos. En su día abandonó la serie donde trabajaba porque pretendía cobrar lo mismo que Antonio Resines en Los Serrano, programa de la competencia. Desde aquel momento pudo vivir desahogadamente gracias a sus ahorros y a otros proyectos de menor envergadura. Sin embargo, en 2015 declaró: “No estoy arruinada, pero estoy pasando por un mal momento”. Y es que Hacienda la condenó a pagar 65.000 euros. La amiga de Almodóvar no tenía dinero suficiente para hacer frente a la deuda así que, poco después, pidió trabajo a la misma productora que abandonó en tiempos de bonanza.
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Aramís Fuster y otros juguetes rotos que lo perdieron todo
> Aramís Fuster entró a GH VIP cuando más lo necesitaba. La vidente había sido condenada por una orden de desahucio después de acumular una deuda de 10.100 euros con el dueño de la casa que tenía alquilada en Marbella. “He llegado a comer pan mojado en agua”, declaraba en la revista Lecturas. Estuvo en el concurso durante tres semanas, pero la justicia le embargó todo el dinero que generó. La ruina de la famosa bruja empezó en 2016. Por aquel entonces, acudió a Telecinco visiblemente desorientada y con muchas maletas. Aseguró estar viviendo en la calle y querer participar en algún programa.
El hijo pequeño de Carmina Ordoñez, Julián Contreras, se convirtió en uno de los rostros más populares de la pequeña pantalla. Cuando terminó su etapa televisiva montó dos negocios que no le fueron nada bien. “Vivo con 160 euros al mes”, aseguraba. Las deudas que generaron sus empresas hicieron que gran parte de sus escasos ingresos quedasen embargados. Abandonó su vivienda y alquiló un humilde apartamento con su padre. El actor Quique San Francisco también confesó haber perdido su casa en 2018. Antes de que se efectuara el desahucio se trasladó a un modesto apartahotel en Pinto. Como vemos, la fama, el dinero y el éxito no construyen un patrimonio eterno, así que, ¿Quién será el próximo famoso en caer?