Kiko Rivera ha vuelto a rajar lo más grande sobre su madre, y lo ha hecho en una entrevista mucho más devastadora que la anterior. Entre otras cosas, el dj ha querido dejar clara la mala relación con su tío Agustín, al que ha acusado de ser básicamente ‘un carcelero’ de la tonadillera, y también ha hablado de su hermana, Chabelita.
La joven no ha vuelto a declarar nada desde su accidentada visita a su madre en Cantora, y vive centrada en sus estudios. Pero, ¿cuál es el verdadero motivo que se esconde detrás de esta desaparición mediática? En Cotilleo.es te lo contamos.
La devastadora entrevista de Kiko
> ¡Nuevo contraataque en la guerra del clan Pantoja! Después de que Isabel Pantoja haya empezado a mover ficha, e incluso le haya quitado de malas formas el coche a su hijo dejándole completamente hundido, Kiko Rivera no se ha quedado de brazos cruzados y ha respondido con crudeza a su madre.
«Mi prima y mi hermana me dicen que está de puta madre, que está más delgada pero es normal», ha asegurado. «¡Es tan duro ser huérfano sin serlo!» Y es que el hijo de la tonadillera más polémica ha hablado sobre muchos temas, entre los que incluye a su hermana Chabelita, la cuál hace bastantes semanas que permanece alejada del frente mediático. Según ella, porque está centrada en sus estudios, aunque el chasco que se llevó la joven durante el ansiado reencuentro con su madre, puede tener mucho que ver. ¿Está tan destrozada Isa que ya no es capaz ni de pronunciarse? ¿Acaso ha recibido serias advertencias por parte de Isabel Pantoja si vuelve a hablar públicamente sobre el asunto?
Mila Ximénez, periodista que ha entrevistado al Dj en Lecturas, ha querido incidir en el tema. «Tu madre le dijo a tu hermana que tu tío la demandaría», afirmaba, algo a lo que Kiko contestaba dirigiéndose de forma directa a su madre. «Sí. ¡Tienes un problema grave! ¡Antepones a tu hermano a tu hija! Aquí hay gato encerrado. ¡Tienes miedo de algo!
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La accidentada visita de Chabelita a Cantora
> Además, Kiko también se ha explayado sobre la visita de su hermana a Cantora. «Mi hermana salió traumatizada de Cantora. Dijo que la vio muy mal y salió llorando, pero es mentira. A mi me ha dicho que la veía bien. ¡Qué la veía con sus cojones de toda la vida de Dios! ¡Como es ella!», ha declarado, aunque, por lo visto, muchas de las cosas que Chabelita habló con la tonadillera todavía las desconoce.
«Mi hermana no me ha contado lo que habló con mi madre. Quedamos para comer y no pudo terminar de contarme, se echó a llorar. Me he sentado con ella, le he contado todo y ha entendido. No comparte que lo haya hecho público, pero era la única escapatoria que tenía. Con mi madre es como si hablases con una pared», sentenciaba. «Mi hermana me dijo ‘No quiero hacerte daño’. Lo único que me contó fue: ‘A ti te llamaba ‘ese’. Mi hermana lloraba». Una prueba más de lo mal que se quedó Chabelita tras esa visita a Cantora.
Sin embargo, Rivera tiene la teoría de que su madre oculta el dolor. «Con Anabel y con mi hermana ha querido ponerse en su sitio. Este fin de año, con tu amiga, te has venido abajo, te has mostrado como estás en realidad. ¡Por fuerza lo tiene que estar pasando mal! ¡Como yo!», exclamaba volviendo a dirigirse directamente a la tonadillera.
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El tremendo disgusto de Chabelita tras reencontrase con su madre
> Kiko no entiende como es que su hermana ha tenido que saltar la valla y su prima Anabel haya entrado tranquilamente. «¡Me dolió mucho que mi hermana tuviera que saltar la valla! Me dijo: ‘Había un coche delante’. Era de mi madre o de mi tío. Ella sale poco, sería de mi tío», destacaba en referencia a la accidentada visita de su hermana a Cantora.
Y es que Isa tuvo que saltar la valla de la finca en la oscuridad de la noche, le abrió la puerta la amiga de su madre y en ningún momento habló con su tío Agustín. De hecho, el reencuentro posterior de Isa con su hermano y su cuñada, Irene Rosales, fue como un bálsamo para ella, que se llevó un gran disgusto con el ansiado reencuentro. Isa tenía claro que cuando terminaran sus compromisos televisivos iba a ver a su madre costase lo que costase. «Voy a llamar a la puerta; pero si no me abren, soy capaz de trepar por el balcón», pero se llevó un chasco.
Y es que a pesar de que la joven no tuvo que trepar por el balcón, si que le tocó trepar la valla y caminar un cuarto de hora en plena noche. Algo, tras lo cuál por fin conseguía llegar hasta Isabel Pantoja. Lo que hablaron en ese momento, solo lo saben ellas, aunque se rumorea que la cantante fue muy dura con ella, y por eso Isa quedó tan afectada. Además, el encuentro duró solo una hora, algo muy distinto a la experiencia que tuvo su prima Anabel, la cuál hace poco también pasaba por Cantora para saludar a los suyos.
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Anabel Pantoja, ‘la niña bonita’ de Cantora
> Visto lo visto, parece que Anabel Pantoja se ha convertido en la única de los Pantoja que es bienvenida en Cantora. Sin embargo, la colaboradora de Sálvame intenta que el escándalo familiar no le salpique. «He aprendido a vivir con ello, pero me parece increíble que mi tía no tenga contacto con Kiko ni Kiko con ella. Ahora mismo no creo que haya solución y yo no voy a mediar», contaba en el programa.
Además, su reciente visita a la finca ha levantado muchas ampollas entre sus primos, quienes no entienden la actitud de su madre, como bien indicaba Kiko en la entrevista en Lecturas. «Estoy tranquila porque dentro de lo malo, está todo bien. Mi visita le hizo feliz, quiero creerlo y además, aunque no os lo creáis, hemos hablado de nuestras cosas, nada del conflicto. Evité el tema», desvelaba Anabel sobre su reencuentro con su tía.
«La vi desconectada y yo lo único que quería es que estuviera bien. Ella tampoco quería sacar el tema. Dentro de lo que cabe la vi mejor. Ella no quiere tener teléfono ni tener información de nada. No voy a entrar en el tema sobre la conversación privada que tuve con mi tía», y es que la sobrina de Isabel Pantoja tiene claro que su trabajo en Sálvame juega en su contra, por lo que ha preferido mantenerse alejada del conflicto y no mediar.
«Sé que no es la opinión que queréis, yo lo entiendo. Os gustaría que me pusiera de un lado o de otro. Yo entiendo que hay que dar un paso, pero voy a darlo hasta donde yo quiera. A mi me han dado la libertad de llegar hasta cierto punto. Y no voy a perder a mi familia por hablar más de la cuenta».