Belén Esteban acumula problemas y enfrentamientos. Es el peaje que debe pagar después de convertirse en uno de los personajes más conocidos de nuestro país. Su ex familia política, el padre de su hija Andrea, algunos de sus propios compañeros, la celeb Carmen Lomana, Olvido Hormigos, María José Campanario, los periodistas que dan voz a Toño Sanchís o sus ex parejas son algunos contra los que suele arremeter. Sin piedad.
Uno de ellos, Ángela Portero, ha querido dar un paso al frente. La periodista ha confirmado que, en contra de lo pensado, sí ha denunciado a la colaboradora. Será un juez el que finalmente decida quién tiene razón. Y es que las acusaciones que la Esteban lanzó en la casa de Guadalix de la Sierra abordan, directamente, asuntos relativos a su más estricta intimidad. Nadie tiene derecho, dice la Ley, a hacer públicos aspectos relativos al significado político, de salud o de dinero. Cualquiera de estos tres extremos son castigados por la justicia que suele entender que solo al afectado corresponde hacer públicos ciertos aspectos de su vida.
La denuncia ya está https://t.co/96axJq9ZrN
— Ángela Portero (@Porteroangela) 11 de noviembre de 2016
Renglón aparte merece la polémica que se ha armado en las redes sociales y en todos los digitales de este país. Ángela Portero denunciaba que Belén Esteban había vetado su presencia en el programa de la tarde de Telecinco: «por su culpa no trabajo», escribió en Twitter. Días más tarde, la periodista compartía con sus seguidores que había recibido la llamada del espacio televisivo: «dicen que no estoy vetada que puedo entrar por teléfono gratis cuando ellos decidan». Una afirmación que ha provocado un auténtico revuelo.
