La camarera de First date, Laura Boado, habla sobre su experiencia en el programa y su pasión por el fútbol
Laura Boado, la camarera de First date que entró sustituyendo a Lidia Torrent habló en una entrevista para el diario El Mundo acerca de su pasado futbolero. Cuenta que fue futbolista profesional y que llegó a jugar en la Segunda División de la Liga F. de fútbol, pero tuvo que dejarlo por una lesión y descubrió su interés por la televisión.
Pero en aquella época el fútbol femenino no tenía buena publicidad y tuvo que soportar mucha agresividad por parte de sus compañeras de instituto, tan sólo por ir en chándal. «Me llamaban choni o marimacho», cuenta Boado. Y agrega: «Me pongo vestido y unos tacones y soy igual de femenina o más que cualquier chica que no juegue al fútbol.
Me insultaban por no llevar esos cánones de faldita
Laura Boado formó parte del primer club femenino de Santiago, el C.D. Conxo Santiago, donde ejercía de portera. Cuando tenía 16 años fue convocada por la selección gallega en una eta que dice que fue increíble «Ahí descubrí lo que era el fútbol de verdad». Lamentablemente sufrió una lesión y tuvo que dejarlo, aunque su pasión por el fútbol no la ha abandonado.
La pasión de Laura Boado por el fútbol sigue bien despierta, pero no olvida aquellas situaciones incómodas y dolorosas por las que tuvo que pasar por no cumplir con los cánones de vestimenta normalizados. «Me insultaban por no llevar esos cánones de faldita y lacitos«. Y agrega: «Ahora, las que me insultaban se ponen camisetas de equipos porque son tendencia».
El boom del fútbol femenino
El fútbol femenino se ha puesto tan de moda que «Ahora mismo, ir a la última es ponerte una falda con una camiseta de fútbol del Milan o del PSG», dice Laura, que aparece a menudo en sus redes sociales posando con camisetas de fútbol. «Es un look que hace años siempre llevaba por jugar al fútbol», cuenta, y agrega que ahora lo sigue llevando por su amor por ese deporte.
Laura Boado se muestra feliz por la visibilidad que el fútbol de mujeres ha conseguido, en parte gracias a futbolistas como Verónica Boquete, Alexia Putellas y Aitana Bonmatí. «Creo que este boom del fútbol femenino se tenía que haber dado hace mucho tiempo porque creo que nos lo merecemos» y asegura que esta evolución es gracias al trabajo que muchas mujeres han venido haciendo por demostrar lo maravilloso que puede ser este deporte.
