En vísperas del próximo capítulo de su vida como madre, protagonizado por su expareja, Bertín Osborne, junto a Gabriela Guillén, Fabiola Martínez celebró su quincuagésimo primer cumpleaños en Madrid. Acompañada de amigos cercanos y su hijo menor, Carlos, fruto de su unión con el reconocido cantante, la ocasión fue marcada por la intimidad y la emotividad.
Fabiola compartió con el público instantáneas de una celebración que destacaba por su atmósfera familiar, impregnada de música de guitarra, decoraciones festivas, canciones y una tarta especial para la ocasión.
El evento se vistió, además, con un mensaje cariñoso de la cumpleañera: «Un año más de vida, de amor, de amigos, de experiencias, de sorpresas, de aprendizaje, de tantas y tantas cosas por las que debo estar agradecida… Así que ¿mi deseo? Si lo digo no se cumple… Pero si se cumple os prometo que lo digo. Cuando me miro en el espejo siempre me digo ‘tú puedes’ y llevo 51 años forjándome, esculpiendo mi consciencia para cada día ser un poquito mejor para mí y para los que me rodean».
A pesar de las circunstancias y las inevitables diferencias entre Guillén y Bertín, Fabiola ha mantenido una postura de respeto y discreción ante la inminente paternidad de su expareja. Este nuevo capítulo en la vida de Osborne significará su sexta experiencia como padre y, por ende, un hermano más para sus hijos Carlos y Kike.
1Fabiola Martínez y la paternidad de Bertín
La periodista ha optado por mantenerse al margen de los acontecimientos relacionados con la futura paternidad de Bertín, instando a la discreción y argumentando que el asunto no es de su competencia. A pesar de las complejidades inherentes a la situación, Fabiola ha demostrado su capacidad para separar asuntos personales y públicos, centrándose en su propia vida y compromisos.
Hace unos días, Martínez asumió un papel destacado al presentar un evento en nombre de la Fundación Kike Osborne. Aunque la agenda laboral impidió la presencia física de Bertín, este envió un mensaje de apoyo a la iniciativa liderada por la madre de sus hijos.
La vida de Fabiola Martínez continúa su curso, marcada por el cumplimiento de años, experiencias compartidas y la determinación de seguir forjándose como individuo. En este nuevo capítulo, la periodista elige la senda de la discreción y el agradecimiento, centrando su atención en las múltiples razones que tiene para estar agradecida en esta etapa de su vida.
A tan solo 4 días del esperado momento en que Gabriela Guillén alcance su fecha estimada de parto, Fabiola Martínez se sumerge en la cuenta, mientras la expectación crece en torno al nacimiento del sexto hijo de Bertín Osborne. No obstante, antes de que este nuevo capítulo familiar se concrete, será necesario someterse a pruebas de ADN para validar la afirmación de la fisioterapeuta respecto a la paternidad del artista.
En medio de este período crucial, Fabiola Martínez experimenta unas Navidades que se tornan agridulces, marcadas por los rumores que circulan sobre el estado de su relación con su exmarido. Se especula que la conexión entre ambos estaría seriamente afectada, posiblemente a raíz de la aparición de varias mujeres con las que se le atribuye deslealtad durante su matrimonio.
Mientras Bertín disfruta de las festividades en el sur, celebrando la Nochebuena con sus hijas Alejandra, Eugenia y Claudia Osborne, así como con la familia de su primera esposa, Sandra Domecq, en Jerez de la Frontera, Fabiola se encuentra en Madrid junto a sus hijos Kike y Carlos. Estos últimos tienen planeado dirigirse a Sevilla en los próximos días para despedir el año con su padre.
A pesar de su firme intención de mantenerse al margen de la vida privada de Bertín, con quien ha dejado claro que ya no comparte vínculos, la reaparición de Fabiola Martínez revela un semblante serio e innegablemente afectado en ciertos momentos. En este contexto, se muestra acompañada por Eugenia Osborne, con quien demuestra mantener una relación cercana y cordial, demostrando que, a pesar de la separación del cantante de rancheras en enero de 2021, siguen siendo familia.
En un acto de desahogo, Fabiola comparte sus inquietudes con Eugenia, mostrándose expresiva y reveladora. En un gesto revelador, se observa cómo se frota la nariz y los ojos, evidenciando la profundidad de sus emociones en estos días tan cercanos al momento en que su exmarido dará la bienvenida a un nuevo miembro junto a Gabriela Guillén.
