Daniel Sancho, 29 años, isla de Koh Samui, al sur de Tailandia, en la cárcel de la isla de Koh Samui, al sur de Tailandia, tras declararse culpable del asesinato y descuartizamiento del cirujano colombiano de 4 años Edwin Arrieta. prisión provisional desde el pasado 7 de agosto. El joven chef se encuentra así en situación de prisión preventiva a la espera de juicio, que no será antes de noviembre.
Tanto él como su familia tienen que estar mu angustiados si piensan en el inminente proceso judicial en el país oriental, pues la Policía tailandesa ha pedido para el hijo de Rodolfo Sancho la pena de muerte por sospechar de que se trata de un brutal asesinato premeditado.
Así pues, la defensa del madrileño se basa en demostrar que Sancho en ningún momento planificó fríamente el crimen.
Para ello, el equipo de abogados que lidera el reconocido letrado español Marcos García Montes ha elaborado un informe al que Cotilleo.es ha tenido acceso.
Daniel Sancho: abrimos el informe que le salvará de la pena de muerte
El exhaustivo informe razones y argumenta que todo lo que el nieto de Sancho Gracia, Daniel Sancho, adquirió en el país asiático era solamente para cocinar y no para terminar cruelmente con con la vida del cirujano colombiano.
Según este documento mostrado en primicia por el programa Y ahora Sonsoles, de Antena 3, «no existe premeditación en cuanto a los cuchillos, la sierra y las bolsas».
En esta sencilla estrategia se basa su defensa para evitar por todos lo medios ser ejecutado en caso de que el juez en Tailandia encargado del caso ordene su pena de muerte. Así, sus caros abogados apuestan por este razonamiento y documentación que la idea de que Daniel que actuó únicamente por improvisación.
“Nosotros con este informe hemos puesto de relieve que estas compras no tienen que ser necesariamente premeditadas porque si piensas que vas a matar a una persona y la vas a descuartizar a lo mejor no compras estos elementos, compras otros, en concreto, nos llama la atención lo de la sierra», explica Carmen Balfagón, portavoz de la familia de Daniel Sancho, quien explica que, a su juicio, si hubiera existido premeditación, Daniel Sancho habría adquirido otro tipo de objetos.
Su defensa: la sierra era, supuestamente, para abrir cocos
Empecemos por los cuchillos. La portavoz de la familia Sancho señala que son herramientas compatibles con la profesión del hijo de Silvia Bronchalo. «Es cocinero y lo hemos acreditado. Tiene un diploma de cocina y de pastelería. Daniel iba a estar hasta el 23 de agosto en Tailandia, evidentemente, no puedes llevarte un cuchillo ni ningún elemento cortante en el avión desde España.
Todos hemos visto cómo Daniel hacía sus propias comidas. Los cuchillos que señalaba la Policía se utilizan habitualmente en la cocina tailandesa. Los cocineros en las calles de Ko Pha Ngan tienen ese cuchillo y una tabla para hacer comidas», detalla.
La sierra, el utensilio que más le acusa de todos los que compró en aquel súper, del que todos recordaremos las imágenes de las cámaras de videovigilancia.»La sierra que compra Daniel es para cortar madera básicamente. En Tailandia el serrucho se usa para una fruta que no se puede cortar de otra manera y para abrir cocos.
La sierra para piezas de carné es otra distinta, que se vende en ese mismo supermercado y que vale exactamente lo mismo. No se me ocurriría comprar una sierra para madera para el fin que yo pretendo», añade al ser preguntada por el sorprendente informe con el que se intentará evitar su muerte tras el juicio.
Por otro lado, el documento también contradice la hipótesis de la policía de Tailandia responsable de la investigación por el asesinato de Arrieta que presupone que el paquete de bolsas de basuras que muestra dicha unidad policial es similar al que compró Daniel, pero no el mismo.
Sobre este punto, Balfagón añade que se emplearon sacos que no habían sido adquiridos por el hijo del actor de la serie Isabel. «Hemos conseguido imágenes de la televisión tailandesa donde hay bolsas de carbón y fertilizantes que se utilizaron. ¿Eso era premeditado? No creo que las comprara para el crimen», explica a los medios.
Y, para terminar la portavoz de la familia Sancho insiste en la abismal diferencia que hay entre los conceptos jurídicos premeditación e improvisación. «No es lo mismo. ¿Qué quiere decir? ¿Qué se utilizara a posteriori para el fin que se perseguía? Sí.
¿Pero que se compraran esos elementos para que tuvieran un fin? Es muy distinto. Si hubiera habido una premeditación, entendemos y el informe así lo pone, se hubieran comprado otros utensilios distintos, está claro que no hubieran sido estos».
