Si a la enorme extensión de Castilla y León unimos su historia, sus paisajes naturales o viñedos difícilmente será no encontrar un rincón bonito por el que perdernos unos días. Esta comunidad autónoma está además repleta de pueblos bonitos y que conservan su encanto con el paso de los años. Aunque es muy difícil elegir, dada la gran variedad de oferta que hay en este sentido, en las siguientes líneas te vamos a mostrar algunos de los que consideramos no puedes dejar de visitar al menos una vez.
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Todo lo contrario es en Castilla y León Astorga, que actúa de centro estratégico de comunicaciones, e incluido en la ruta del Camino de Santiago y encrucijada de la Vía de la Plata. Cuenta con un patrimonio histórico y artístico muy difícil de igualar, donde perduran restos del imperio romano, mezclados con muestras de la importancia de la época medieval. Debes visitar su Palacio Episcopal, diseñado por Gaudí, su Catedral, el Santuario de Fátima o la Iglesia de Santa Marta, las Termas Mayores y Menores, las cloacas romanas y el foso campamental.
