Las sardinas es uno de esos productos que gustan a casi todo el mundo pero que casi nadie quiere hacer en su casa por el olor que van a dejar en las mismas. Se puede decir que es uno de los mejores pescados azules que podemos incluir en nuestra dieta, y que además son facilísimas de preparar y puedes cocinarlas de muchas formas distintas para ir variando y nunca cansarte de comerlas, por lo que en las siguientes líneas te vamos a mostrar cómo puedes hacerlas sin tener que echar luego ambientador para que se vaya la «peste» que han dejado.
Formas de hacer sardinas
Aunque tienes la opción de comer sardinas en conserva, a palo seco o con un siempre socorrido bocadillo, y con lo que desde luego no vas a tener ningún problema con los olores, piensa primero que el sabor no es el mismo. Una forma súper original y además que está buenísima, es prepararlas siguiendo esta receta de sardinas en escabeche. Un plato muy aromático y sabroso, ideal para compartir en verano y en cualquier época. Quedarán siempre riquísimas porque primero se rebozan y se fríen, y luego se sumergen en el escabeche.
La mejor forma de hacer sardinas
La mejor forma de hacer sardinas es al horno, claro, de manera que todos los vapores de la cocción se queden en el interior del horno y no se repartan por todos los rincones de la casa y de esa manera evitamos ya sin problemas los olores. Además, para que te queden bien sabrosas, lo único que tienes que hacer es un buen marinado y pintarlas antes de hornearlas. La mezcla de aromas del marinado es lo que hará que tus sardinas no huelan cuando las cocines al horno.
Cómo limpiarlas
Te huelan o no las sardinas, lo primero que tendrás que hacer si quieres disfrutar de su exquisito sabor es limpiarlas. Lo mejor es que te lo hayan hecho en la pescadería en el momento de adquirirlas. En ese caso al llegar a casa sólo tengas que lavarlas bien bajo el grifo para eliminar los restos de sangre. Después será suficiente con dejarlas en el escurridor hasta que suelten el exceso de agua. De lo contrario tendrás que abrirlas tú con unas tijeras y sacarlas tú mismo/a las tripas, aunque muchos dicen que con éstas están aún mejor.
Cómo marinarlas
Siguiendo con nuestras sardinas al horno, el siguiente paso será marinarlas, algo que puedes hacer con una sencilla mezcla de ingredientes como 2 dientes de ajo picados, un buen manojo de perejil, el zumo de medio limón, un poco de aceite de oliva y una pizca de sal. Simplemente con eso tendrás un sabroso marinado con el que aderezarlas para que queden riquísimas. Hay que triturar todo en el vaso de la batidora, y pintarlas con el marinado antes de hornearlas.
Primeros pasos para hornearlas
Y llegaría el momento de meter las sardinas al horno. Para ello, hay que preparar una bandeja de horno en la que quepan todas las que tengamos sin estar unas encima de otras. Se cubre con papel de horno y se esparce una capa de sal para hornear de manera que cubra el fondo. Esto tiene una doble finalidad ya que por un lado ayuda a salar las sardinas y por otro lado evita en gran parte los desagradables olores que se forman en la cocina ya que la sal va recogiendo los jugos. Luego hay que ir colocándolas encima, juntas unas a otras pero sin que estén unas encima de otras y echa una pequeña capa por encima de sal para hornear.
Cómo acabarlas en el horno
Una vez que las sardinas están preparadas en la bandeja se introduce la mis en el horno a altura media y se hornea entre 15 y 20 minutos. Este tiempo es muy variable y solo a modo orientativo ya que influye la temperatura real del horno (no todos los hornos marcan la temperatura a la que están horneando realmente) y también el tamaño de las sardinas. Para asegurarte, cuando lleven 15 minutos saca una y comprueba si la piel se desprende fácilmente (si son muy frescas favorece que la piel se desprenda) y el interior está jugoso aunque sin partes crudas.
Trucos contra el olor
El segundo truco contra el olor de las sardinas consiste en tener preparada una fuente de horno pequeña con agua caliente y limón (ya sea en rodajas o incluso cáscaras que tengas de haberlo exprimido ese día) o vinagre. Cuando saques las sardinas del horno introduce la bandeja con el agua y el limón o el vinagre y mantén el horno encendido 5 minutos más. De esta forma el vapor generado ayudará a limpiar el horno y librarnos rápidamente de esos olores.
