Las ensaladas son sin duda las reinas de la cocina en primavera y verano, estaciones en las que el buen tiempo suele conllevar el alejarse de ella cuanto más mejor. Son épocas en las que al personal le empiezan a gustar menos platos menos «de cuchara» y mucho más otros más ligeros. Por todo ello la receta perfecta veraniega son las ensaladas, por mucho que a veces estemos cansados de usar siempre los ingredientes más tradicionales como lechuga o tomate. Para variar tu dieta y la de tu familia vamos a mostrar en las siguientes líneas algunas ideas diferentes para hacerlas sin lechuga, lo que no quiera decir que no vayan a gustar a todos. Se hacen rápido, así que ese tampoco será problema alguno.
Ensaladas con garbanzos
Ensaladas con garbanzos nos permitirá no dejar de disfrutar de un alimento tan habitual del cocido pero que en verano no apetece tomar caliente. Los ingredientes que necesitaremos serán 400 gramos de garbanzos cocidos, 125 gramos de pimiento rojo cortado, otros 125 gramos de pimiento verde, 100 gramos de pepino, una manzana, un limón, un tomate, una cebolla, hojas de hierbabuena, aceite de oliva virgen, sal, pimienta y comino molido. Lo primero es cortar en finas tiras una cebolla, en taquitos un pepino, quitándole la piel y en trozos no muy pequeños una manzana. Después mezcla agua y un chorrito de limón en un bol aparte y échale la manzana ya cortada. Picar la hierbabuena, quitarle el tallo a un tomate y trocearlo. Se escurre la manzana que habíamos añadido y se juntan todos los ingredientes en una ensaladera removiéndolos para que queden bien revueltos. Añade un chorrito de aceite, sal, pimienta y comino y mézclalo.
