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Increíble: así ha sido la brutal transformación física de los colaboradores de Sálvame

No siempre es oro todo lo que reluce. Algunos empeoran con el paso del tiempo, y otros mejoran como el vino. Todos pasamos por etapas mejores y peores, y los colaboradores del programa Sálvame no iban a ser menos.

La buena imagen en televisión es una de las cosas más importantes. Algunos, de manera natural, y otros han pasado por los retoques estéticos para mejorar su apariencia. Veamos cómo han sido los cambios de algunos de ellos. No tiene desperdicio.

Belén Esteban, la colaboradora de Sálvame que se ha transformado

Increíble: así ha sido la brutal transformación física de los colaboradores de Sálvame

Muchos dirían que lo de Belén Esteban no fue una transformación, sino una evolución en toda regla. Parecen tres personas diferentes. Las fotografías, de hecho, pertenecen a etapas muy distintas en la vida de la colaboradora. Alguna de esas etapas, está enterrada y olvidada para ella. Operaciones estéticas, subida y pérdida de peso… todo eso lo ha afrontado como ha podido en los últimos años, y parece que a día de hoy está muy contenta y satisfecha con su cuerpo.

Es más, lo ha afrontado con la naturalidad de cualquier mujer de barrio de toda la vida. Y se supone que por esa autenticidad, toda la gente humilde quiere a Belén Esteban. No quieren una Belén artificial, sino a alguien natural con la que se identifican cada tarde en Sálvame.

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Kiko Hernández, una vez fue joven

kiko hernandez de joven y ahora

Sí, Kiko Hernández también ha sido joven. Han pasado dieciocho años desde que le vimos por primera vez como concursante de Gran Hermano. No hay duda de que supo jugar bien sus cartas, y eso le ha llevado a ser uno de los mejores en lo suyo. A ser un ejemplo en la televisión de entretenimiento.

Vemos que casi 15 años después, Kiko se ha hecho más mayor. No le ha ido tan mal como es el caso de otros compañeros, pero sí que se nota la diferencia. En algunos aspectos, como en su boca, la mejoría ha sido clara. Las fundas y las carillas dentales son el arma fácil y casi esencial para todos los famosos que trabajan delante de las cámaras. Y la suerte que tiene con su pelo, que sin necesidad de ningún tratamiento, conserva casi la misma cantidad que hace años