Pulpo y almejas, menudos dos manjares para preparar un plato que para los amantes de ambos va a ser irrepetible. Aunque puede haber distintas maneras de prepararlo, en la receta que vamos a desarrollar a continuación vamos a utilizar patas de pulpo de las que ya vienen cocidas y envasadas al vacío, con un poco de agua de cocción en forma de gelatina. Cuando lo saquemos del envase habrá que calentarlo en el microondas para que la gelatina se vuelva líquida y poder usar este agua en la salsa. Y por si alguien lo duda habrá que limpiar las almejas antes de cocinarlas, por mucho que ya vengan listas para el consumo después de haber pasado por la depuradora, para eliminar cualquier resto de arena que pudiera quedar en su interior.
Qué almejas elegir
Aunque el pulpo es el elemento principal, también tienen gran protagonismo las almejas y por ello, para esta receta, si se puede, hay que utilizar la japónica, que tiene muy buena relación calidad-precio, aunque en verdad se puede utilizar cualquier variedad. Lo que sí es fundamental es que las almejas estén vivas cuando las vayamos a cocinar. Antes de cocinarlas, desecharemos las que tengan la concha rota o las que estén abiertas y que, al darles un golpecito no se cierren. Después de cocinarlas, desecharemos las que no se hayan abierto.
