Ya son las 8 está en el centro de la polémica. La audiencia está indignada con los colaboradores de Sonsoles Ónega a los que acusan de fomentar la gordofobia. La modelo Eva María Pérez aparecía en el programa para debatir sobre la decisión de Kim Kardashian de incluir modelos con todo tipo de tallas en su nueva línea de ropa y la importancia que esto puede tener en la visibilidad de la diversidad de cuerpos. Pero la entrevista no fue por el camino esperado y la modelo tuvo que aguantar comentarios muy fuera de lugar. ¡Te lo contamos!
Los colaboradores desvían el debate sobre la diversidad: «¿Estética y salud?»
>Eva María Pérez conocida en redes sociales como @yonosoy906090, es una modelo curvy y activista por la diversidad de tallas que lleva inmersa en el mundo de la moda más de 20 años por lo que conoce bien todos los entresijos de este campo, incluso los más oscuros: «Anteriormente te mandaban tener como una 46, ahora te piden una talla 40», explicaba sobre las exigencias para que te consideren modelo curvy. Eva María, que ha desfilado en importantes pasarelas, ha hablado sobre la discriminación que ha sufrido por su cuerpo y ante esto Miguel Ángel Nicolás veía oportuno hacer una pregunta que ha indignado a la audiencia: «¿Dónde está la línea de la estética y la línea de la salud?», planteaba ante el atónito rostro de la modelo, y añadía «muchas veces este tipo de imágenes no sé si promueven una vida saludable». Un planteamiento que, de nuevo, pone en evidencia la poca coherencia que hay en relacionar las tallas grandes con tener mala salud y que la invitada no tardó en reprocharle.
Porque el debate sobre si las modelos curvy promueven malos hábitos de salud solo por el hecho de ser imagen de alguna marca parece estar lejos de acabar, y Eva María Pérez ha tenido que hacer frente a este tema en Ya son las 8. Criticando que se siga relacionando a las tallas grandes con tener mala salud -algo que no se hace con el resto de cuerpos, la modelo les mandaba a reflexionar sobre cómo la sociedad trata a las personas gordas: «En España, en general, cuando ven a una mujer con curvas piensan que no se cuida nada, y a lo mejor igual se cuida más que una persona delgada. Creo que se debería dejar de juzgar a las personas porque estoy muy feliz con la talla que tengo», defendía pero los colaboradores seguían insistiendo en este tema provocando una situación tensa e incómoda.
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