Si una mujer marcó la vida de Sergio Dalma, esa fue Maribel Sanz. Protagonistas de lo que fue una larga guerra por el amor de su hijo Sergi, nada queda ya del amor que algún día de jóvenes se procesaron. A sus 56 años, el cantante se encuentra viviendo una de las etapas más duras de su carrera a causa de la pandemia. Aunque en el ámbito personal puede estar feliz y tranquilo por su cada vez mejorada relación con su hijo tras haber enterrado el hacha de guerra hace unos años. Este miércoles el cantante acudirá a El Hormiguero para hablar sobre su nueva gira con la que conmemora sus 30 años sobre el escenario. Pero, ¿Qué ha sido de los conflictos familiares que convirtieron al artista en el punto de mira de los medios?
Sergio Dalma regresa después de un año con su gira 30…y tanto
> Lejos de los conflictos familiares y más centrado en su carrera profesional que nunca. Así se encuentra en la actualidad Sergio Dalma, el artista que mueve millones de fans y que ahora, retoma su gira 30…y tanto tras un año alejado de los escenarios a causa de la pandemia. Desde la reconciliación con su hijo Sergi, el cantante se ha mostrado bastante tranquilo. A pesar de que su ex mujer Maribel Sanz si ha continuado, en numerosas ocasiones, haciendo declaraciones sobre su relación con él, Sergio Dalma sigue en su línea de hacer oídos sordos. Lo cierto es que, aunque la modelo parece haber encontrado de nuevo el amor con un bombero con el que lleva casi más de ocho años de relación, sigue insistiendo en que Sergio todavía sigue guardándole rencor.
Después de un año de compromisos laborales paralizados por las restricciones de seguridad del Covid-1, el artista anunciaba hace unas semanas que retomará su gira 30…y tanto. Un proyecto muy especial en el que celebra el 30 aniversario de su carrera musical y de la contará más detalles este miércoles durante su visita a El Hormiguero como invitado. Lo que si sabemos es que esta gira se prolongará hasta el 2022 y de la que podrán disfrutar desde sus seguidores de Madrid hasta los de Gran Canaria.
