En la sección de panadería de Lidl encontrarás una gran selección de panes para todos los gustos, algunos integrales, otros dulces, con cereales… la variedad es casi infinita y puede que no te consigas decidir a la hora de comprar el adecuado. Para facilitarte esta tarea hemos analizado las propuestas de este supermercado y hoy te vamos a mostrar cuáles son los panes que NO te recomendamos de este establecimiento.
1El panecillo redondo
Este pan de Lidl se presenta como un brioche ligero de origen austríaco, y que empezó a producirse en Francia en el siglo XIX. Tierno y con un sabor ligeramente dulce, destaca por su esponjosidad y consistencia. De ahí que sea una opción perfecta para preparar bocadillos, canapés y tentempiés en cuestión de minutos. Parece muy práctico y delicioso según la marca.
Lo cierto es que este pan no es precisamente el más saludable gracias a ese toque que denominan como ligero y dulce. Además, tiene una gran cantidad de componentes que pueden resultar alérgenos y que no se deducen a simple vista, que son los cereales que contienen gluten, crustáceos y productos a base de crustáceos, huevos, pescado, cacahuetes, soja, leche y sus derivados (incluida la lactosa), frutos de cáscara, apio, mostaza, granos de sésamo, sulfitos, altramuces y moluscos.
