Paz Padilla es una mujer muy afortunada. Tras el triste fallecimiento de su marido, Antonio Vidal, afirmó: “estoy triste, pero soy feliz”. Y no es para menos, porque la presentadora ha conseguido dejar atrás sus orígenes humildes levantando un imperio millonario. Todo lo que toca lo convierte en oro: una tienda de ropa, funciones de teatro, un hotel rural… y un sinfín de negocios que la han posicionado como una de las personas más ricas de la televisión.
Recientemente, ha lanzado al mercado una línea de bolsos que ha sido todo un éxito, y no ha tardado en agradecerle a su hija Anna Ferrer el ánimo que le ha dado en esta nueva aventura. Parece que Paz Padilla tiene todo lo que pudiera desear: fama, dinero y trabajo. Pero, le falta lo más importante: el amor. Desde que perdió a Antonio Vidal, la presentadora no ha vuelto a ser la misma. Su último intento por superar el trance ha sido publicar un libro, El humor de mi vida, que, antes de salir a la venta, ya está completamente agotado en las librerías. ¿Por qué Paz no consigue disfrutar de su éxito?
3“Es mi forma de decirle al mundo que puedo hacer lo que me proponga”
> Paz Padilla no solamente ha triunfado en los escenarios, también se ha convertido en uno de los rostros mejores pagados de la televisión. Según ha salido publicado, recibe 50.000 euros mensuales por participar en La que se avecina, la ficción más vista de Telecinco. Los ingresos millonarios de la humorista, han sido suficientes para levantar un imperio de la nada. Es propietaria de dos restaurantes, uno en Madrid y otro en Cádiz, tiene un hotel rural en Barcelona y una tienda de ropa en su tierra natal. Todas las aventuras empresariales de Paz Padilla son aplaudidas por el público. Así que, no ha dudado en pedirle a su hija Anna ayuda para crear un nuevo negocio. Madre e hija han fundado una marca de bolsos, No Ni Ná, totalmente artesanal.
Es un proyecto muy especial para Paz por dos motivos: primero porque trabajara al lado de su hija, y segundo porque en esta empresa ha puesto toda su esencia. “No Ni Ná es la reivindicación a los días malos, a la gente que no cree en ti, que intenta hacerte daño. Es mi forma de decirle al mundo que yo puedo hacer lo que me proponga. Me encantaría trasmitir eso en cada pieza, y repartir por el resto del mundo la esencia de mi tierra”, comentó la humorista durante la presentación de la empresa. Su hija, Ana Ferrer, ha estudiado marketing, y actualmente está cursando un máster de especialización. Así que, ha sido la cabeza pensante de este nuevo negocio. Paz Padilla está muy orgullosa de ella. Y no es para menos, pues da la sensación de que madre e hija son muy parecidas: las dos han conseguido todo gracias a su esfuerzo.
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