Tamara Falcó La marquesa se ha convertido en uno de los personajes más populares del corazón y de la televisión. Su incorporación como estrella en el programa de Pablo Motos y como jurado en El Desafío, hace que el interés por ella crezca diariamente. Tildada, por la opinión pública, de no hacer nada anteriormente, porque no se le conocía ni oficio ni beneficio como aquel que dice, en un año se ha puesto las pilas. Te vamos a contar todos los detalles, de cómo es la vida de la novia de Íñigo Onieva de mañana a la noche e incluso cómo y con quién duerme.
Si antes tenía lugar siempre en las revistas y presentaciones, ahora lo suyo es otra historia. Cada vez se ha convertido en alguien más cercano. Esa amigui que ‘todos’ querríamos tener. Porque la hija de Isabel Preysler y el marqués de Griñón, a pesar de su acento hiperpijo, es de lo más divertida, espontánea y cariñosa. Hasta tenía ese puntito de… ¿qué me estás diciendo?
Tamara Falcó alucina en casa con todo lo que ve en la calle
> Pues lo primero que hace Tamara Falcó nada más llegar al trabajo en Atresmedia es prueba de maquillaje y vestuario. ¡Qué horror! ¿Verdad? No sé si podría vivir con esa tensión al entrar en el work (trabajo). Pero bueno, lejos de bromas, luego hay reunión de equipo, y enseguida comienzan la puesta en antena. Y es que Motos y Salvador, son muy pero que muy cuidadosos con todo lo que hacen y por eso, las reuniones de equipo son tan importantes.
En un vídeo para Vanity Fair (VF) Tamara revela que el subidón de la adrenalina en el programa es tan alto, tan alto, tan alto, que cuando llega a casa no se puede ni dormir… Una de las cosas que más extrañó a Tamara al llegar al programa de El Hormiguero es que había un animador para subir la temperatura del calor de los invitados. ¡Claro es que seguro que en las fiestas a las que ella acudía o las que se hicieran en casa de mamá Preysler, eso no era nada fino! Menos mal que ella está codeándose con el común de los mortales, y ahora, hasta va e instaura lo del animador para fiestas y cumpleaños… Aunque con el arte que ella se gasta, seguro no le hace falta nadie y ella es la mejor. ¡No me quiero ni imaginar a Mario Vargas Llosa y a Isabel!
De la misma manera que ha sido la artista que ha supervisado el cambio de cocina de Villameona, puede meter ella este nuevo hit de animador cuando quiera. Aunque a lo mejor se ríen de ella como le ha sucedido en otras ocasiones, como cada vez que se pone la chaquetilla de chef, que su madre Isabel y su hermanita Ana Boyer se mueren de la risa. Y no es que en Cotilleo.es no lo inventemos, que no, que es palabra de Tamarita Falcó. Pero a ella eso le da igualito.
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