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De tal palo tal astilla: los cachorros heredan los vicios de sus famosos padres

Con el tema de Zayra, la hija de Guti y Arantxa de Benito, en pleno auge, no hemos podido evitar preguntarnos si esa conducta tan rebelde viene heredada de los propios padres.

Y es que hay más de un famoso que se ha quejado del difícil e indomable carácter de sus hijos, cuando ellos fueron igual o incluso peores, y sino que se lo digan a Rocío Carrasco. A continuación, vamos a exponerte a esas celebrities que traían de cabeza a sus padres en sus tiempos de mayor desenfreno.

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Embarazos inesperados y a edades muy tempranas

antonio david rocío carrasco y rocío jurado

>  Rocío Carrasco tenía un brillante futuro por delante, y además contaba con la ayuda de su madre, la gran Rocío jurado, para cumplir su sueño y dedicarse a la moda. Sin embargo, Antonio David se cruzaba en su camino, y todos los planes se iban al traste irremediablemente después de que se quedara embarazada. Una bomba que caía como un jarro de agua fría sobre la familia, y obligaba a la pareja a pasar por el altar poco después.

«Rocío se queda embarazada, se hace el test y le pide a esta amiga suya que vaya a la farmacia a recogerlo como si fuera un test suyo. El test da positivo y esta chica habla con una revista y vende la noticia», desvelaba Antonio David. Además, el tertuliano también ha dado detalles sobre la reacción de la cantante al descubrir la noticia del embarazo de su hija. Así, según él, a Jurado no le pareció mal, sino que le sentó peor a Pedro Carrasco, padre de Rocío, ya que no terminaba de aceptar que su hija de dieciocho años fuese a convertirse en madre tan pronto.

Algo parecido le pasó a Isa Pantoja, la hija de Isabel Pantoja, que se convertía en madre cuando todavía no había alcanzado la mayoría de edad. «Yo pensé que me mataba. Mi familia es muy tradicional, me dio un abrazo, se echó a llorar, se asustó un montón. Pero me dijo que estuviera tranquila», confesaba Isa sobre la reacción que tuvo su madre. «Querían saber si todo estaba bien. No le echo la culpa a mi madre porque se sentó a hablar conmigo, pero yo estaba muy rebelde», reconocía.

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