La infanta Elena es una de las mujeres más discretas de la monarquía. Pero eso no ha impedido que muchos de sus secretos más oscuros salgan a la luz, provocando serias consecuencias. La hermana mayor del rey Felipe VI tiene un pasado oculto en el que las drogas, un aborto y los problemas psicológicos juegan un papel fundamental. ¿Quieres conocer más detalles? Sigue leyendo, te lo contamos todo en la página siguiente.
3El aborto de la infanta Elena
> La vida sentimental de la duquesa de Lugo no ha sido un cuento de hadas, precisamente. Se enamoró perdidamente de Luis Astolfi, pero este le dio puerta por la mujer que se terminó convirtiendo en su esposa. Para callar las habladurías que la tachaban de solterona, la infanta Elena se casó con Jaime de Marichalar, pero su matrimonio con él fue un auténtico infierno casi desde el minuto uno. El divorcio le rondaba la mente pocos años después de que nacieran sus dos hijos, pero el ictus que sufrió el aristócrata truncó sus planes.
Para guardar las apariencias, tuvo que acompañarlo a tratarse en Nueva York. Cuando de Marichalar se fue recuperando y parecía que la vida les daba un respiro, decidieron regresar a España. Por desgracia, el destino tenía reservado otro revés para la infanta Elena. Embarazada del que hubiera sido su tercer hijo, perdió al bebé poco después de volver a Madrid. Fue el culmen de un matrimonio nefasto y al final se produjo lo inevitable: la primogénita de Juan Carlos y Sofía se divorció de su marido.
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