El cuñado del rey Felipe VI atraviesa por una etapa complicada en prisión, donde permanece asilado y sin ver a sus seres queridos desde que se decretó el estado de alarma en España. Son días duros para Iñaki Urdangarín y su esposa, la infanta Cristina, que no puede hacer nada por aliviar el dolor de su marido. Sigue leyendo para conocer todos los detalles.
3Cierran las puertas a Iñaki Urdangarín
> El Hogar Don Orione acoge en sus instalaciones a personas altamente dependientes, es decir, especialmente vulnerables al coronavirus. Por eso, se han extremado las precauciones con los pacientes y no se espera que el personal de voluntariado regrese a la fundación hasta que se superen todas las fases de la desescalada, como mínimo. “(Urdangarín) Debe ser el primero en querer volver aquí, él sufre un confinamiento sobre su confinamiento y debe ser muy duro, y lo sentimos de corazón, pero aquí hemos vivido y seguimos viviendo momentos dificilísimos y no podremos contar con los voluntarios en mucho tiempo”, señalan desde el centro a Vanitatis.
Además, desde el Hogar Don Orione confirman que los primeros en volver a pisar el centro serán “los familiares, que son los que más lo necesitan”. Sin que su familia pueda visitarlo y sin la posibilidad de abandonar la prisión para prestar labores de voluntariado, se plantea una temporada bastante complicada para Iñaki Urdangarín, que siente, ahora más que nunca, el desgarrador frío de la soledad.
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