Kim Kardashian es una mujer muy trabajadora. Cuanto más tienes, más te exigen. Su responsabilidad es tremenda y su facturación anual no viene de la nada, aunque algunas publicaciones apuntan a que su caché y sus puntos de influencia habrían bajado hasta un 50% desde que se alejase cuatro meses de las redes sociales tras el robo a punta de pistola que sufrió en su casa de París.
Este terrorífico hecho, que tuvo lugar el pasado 2 de octubre mientras disfrutaba de los desfiles de prêt-à-porter en Francia, marcó su vida y le ha cambiado la mente. Y en este sentido la entendemos… ¿Dónde está su equipo de seguridad? ¿Cómo es posible que 5 personas entrasen así como así?