Álex Lequio lleva mucho a sus espaldas desde que le diagnosticaran que padecía cancér. Sus padres optaron porque su hijo recibiera tratamiento en Nueva York. Allí se captaron las primeras imágenes de Álex tras sufrir los efectos de la quimioterapia. La lucha continúa y Ana Obregón ha estallado. Te contamos qué ha pasado.
El viaje más duro de Álex Lequio
Fue a principios de año cuando empezó el calvario para los Lequio-Obregón. Álex no se sintió bien y telefoneó a su madre. Fueron al hospital y tras pasar tres días ingresado, el diagnóstico no pudo ser más descorazonador. Tenía cáncer. A partir de ese momento, Ana Obregón y Alessandro Lequio se pusieron manos a la obra para encontrar la mejor solución para su hijo. La encontraron en Nueva York, tras hablar con un oncólogo amigo de la familia Obregón. El doctor Baselga recomendó que viajaran inmediatamente para empezar el tratamiento.
El viaje de ida fue muy duro. Álex no podía aguantar el dolor y le prescribieron calmantes fortísimos, como la morfina. Sin embargo, como para él la tranquilidad de los suyos es lo primero, disimuló todo lo que pudo para no preocupar a su madre. Y una vez en ya en Nueva York, llegó otro duro revés.
Tratamientos de diez horas al día
Estaba previsto que Álex ingresara en el hospital donde ejercía entonces el doctor Baselga para iniciar el tratamiento. Sin embargo, no pudo ser porque sufría terribles dolores y eso hizo que fuera directo a urgencias. Para entonces, ya le habían prescrito morfina pero ni por esas conseguía alivio. Y fue allí donde los médicos informaron que el tipo de tumor que tenía el empresario requería atención inmediata.
«Los tratamientos de Álex eran de tres días seguidos, 10 horas al día. He pasado noches en vela, con el termómetro en la mano por si le subía la fiebre y había que ir a urgencias, he dormido en los pasillos de los hospitales. Ver lo que yo he visto… La fortaleza de mi hijo me ha hecho fuerte, él no se ha quejado ni una sola vez. Le clavaban cien mil agujas y me decía: ‘Mamá, somos guerreros’», explicó Ana Obregón tras regresar a Madrid.
Ana Obregón estalla
Tras seis meses en Nueva York, Ana y Álex regresaron a Madrid. Desde entonces, el empresario continúa con su trabajo al frente del negocio que creó. Ha optado por la normalidad como terapia para superar totalmente la enfermedad. Todavía está en tratamiento y debe repartirse en entre Navarra y Nueva York para acabar con el cáncer. Pues bien, en estas fechas navideñas, Álex Lequio ha celebrado una cena su equipo y ha querido compartir el momento en redes sociales. Así reza el texto que acompaña a la fotografía: “Gracias a todos los que hacéis de este proyecto un sueño por el que luchamos unidos y felices. Agradecido con el cosmos por todas las personas que os estáis sumando a la lucha”.
Al ver el coraje de su hijo, que no tira la toalla, Ana Obregón ha estallado de orgullo: “No es amor de madre pero verte luchar cada día y trabajar en tu empresa sin descanso… ¡Ahí el resultado! Enhorabuena equipazo de Polar Marketing». Sin duda, la actriz lo ha pasado muy mal. De hecho, la enfermedad de su hijo la ha marcado al punto que su vida ha cambiado. Lo profesional ha pasado a un segundo plano. Ana Obregón está retomando la actividad pero siempre con un ojo puesto en Álex. Así es el camino que le queda por recorrer al empresario.
La lucha de Álex no ha acabado
El hijo de Alessandro Lequio sigue recibiendo quimioterapia. De hecho, recientemente sufrió una bajada de defensas tan fuerte que obligó a ingresarle en régimen de aislamiento en Navarra. Los estragos del tratamiento son visibles. Poco le importa a Álex, que ha decidido sumergirse en una espiral de normalidad como medida de choque contra la enfermedad. Aunque está instalado en Madrid, debe viajar a Navarra y Nueva York para realizar controles periódicos.
Quien también ha estado pendiente de Álex ha sido su padre, que se ha dividido entre Madrid y Nueva York. En las pocas ocasiones en que ha hablado sobre la enfermedad de su hijo se ha mostrado visiblemente afectado. La terrible circunstancia ha hecho que se produzca un acercamiento entre los hijos de Alessandro. Clemente viajó a Nueva York para visitar a su hermano y permaneció unos días junto a él. Hace tiempo que abandonó Italia y se instaló en Miami.
Ana y Alessandro, lo opuesto a Terelu
En ningún momento Álex y sus padres han querido lucrarse de la enfermedad. Su comportamiento ha sido completamente opuesto al de Terelu Campos, que ha recibido grandes críticas por las muchas entrevistas pagadas que ha realizado. Ana Obregón tan solo concedió una entrevista al regresar de Nueva York y en su ánimo estaba donar el dinero a una organización benéfica.
Alessandro se ha mostrado muy discreto y tan solo hizo una comparecencia pública en un acto al que tenía que haber asistido su hijo. No pudo ser porque los médicos desaconsejaron el viaje. El colaborador de televisión estuvo muy amable y no dudó en atender a los medios allí desplazados.