Leticia Sabater está acostumbrada a saltar de escándalo en escándalo. Durante la década de los noventa, fue una de las mejores presentadoras de la pequeña pantalla. Empezó trabajando en TVE, y las cadenas privadas no pararon hasta que pudieron tenerla en su parrilla. Sin embargo, una mala gestión, hizo que dejara atrás su reputada imagen profesional a principios de los 2000. Desde entonces, Leticia ha insistido por participar en cualquier programa con el objetivo de recuperar el protagonismo que perdió. Su reputación es cada vez más turbia y, actualmente, no es más que una sombra de lo que fue. La lista de montajes con las que ha pretendido volver a televisión es infinita. La antigua presentadora no ha dudado en usar su propio cuerpo para llamar la atención de los periodistas. Por no hablar de la renovación profesional que ha sufrido en los últimos años, ¡Sus canciones son cada vez más indignantes! ¿Sabían que presume de ser amiga del Rey? Te contamos todo lo que ha hecho para ganar dinero a consta de bombardear su imagen.
Su primer intento por no caer en el olvido: mantener relaciones íntimas en la playa
> Durante la década de los 90, Leticia Sabater era una de las presentadoras mejores pagadas de TVE. Empezó siendo azafata del mítico programa Un, dos, tres, y llegó a convertirse en una de las famosas chicas Hermida. Pronto le pusieron al mando de algunos programas, como No te lo pierdas. Tal fue su éxito, que Telecinco le hizo una suculenta oferta hasta conseguir tenerla en su equipo. En la empresa de Paolo Vasile estuvo al frente de varios formatos, hasta que decidió rescindir su contrato. A partir de entonces, la carrera profesional de Leticia Sabater ha sido cada vez más oscura. Al darse cuenta del protagonismo que estaba perdiendo, no dudo en mantener relaciones con su pareja en la playa sin ningún tipo de discreción. Su objetivo era que los periodistas la grabasen y pudiera regresar a la televisión para dar explicaciones. De esta forma, en 2008, acudió al plató de Donde estás corazón.
Enseguida fue acusada de provocar estas imágenes, a lo que Leticia respondió: “A lo largo de mi carrera no he dado ningún escándalo. Siempre me he caracterizado por trabajar”. Según ella, su pareja le había tendido una trampa, aunque, ningún periodista confió en su palabra. “Me parece una auténtica cerdada que haya un tipo ganando dinero haciendo estas fotos”, exclamó muy indignada. Pero, lo cierto, es que la única que sacó beneficio con toda esta historia fue la propia presentadora. Tal fue el éxito que tuvo este supuesto montaje, que, en 2014, convenció a Olfo Bosé para repetir algo parecido. Fueron pillados paseando juntos en actitud muy cariñosa, y las imágenes llegaron a muchos programas. Sin embargo, pronto se descubrió que era una escena fingida que pretendían rentabilizarla en los platós.
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La gran condena de Leticia Sabater: los programas de bajo presupuesto
> La última vez que Leticia Sabater trabajó como presentadora fue en 2004, en Merienda con Leticia. Desde entonces, no ha parado de llamar la atención de los periodistas para volver a los platós de televisión. Sin embargo, su imagen está muy deteriorada, y únicamente ha conseguido formar parte de los programas con bajo presupuesto. En 2011, entró a concursar en Acorralados, un reallity con el que Telecinco pretendía imitar al fenómeno Supervivientes de una forma más económica. Leticia protagonizó una turbulenta historia de amor con otro de los participantes, Reche. En una de las discusiones que mantuvo con él, se quedó semidesnuda en el plató, dejando mudo incluso a Jorge Javier, que era el presentador del concurso.
Otro de sus intentos por que su nombre volviera a sonar en televisión, fue cuando aseguró tener una relación muy estrecha con el Rey, Felipe VI. “Es una persona adorable. Le encanta pasar desapercibido, que le traten como a una persona normal”, le confesó a María Patiño. Leticia aseguró que había bailado muchas veces con él, e incluso conocía a sus hermanas. “Son muy diferentes. Las dos son encantadoras, pero Elena es más reservada”, aseguró. Después de esta confesión, se declaró seguidora del Partido Popular, y se postuló como una de las imágenes oficiales de esta ideología.
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Una cantante ridiculizada por todo el país
> En una de las entrevistas con las que Leticia ha continuado haciendo dinero en televisión, confesó uno de sus mayores traumas: de pequeña había sufrido acoso escolar. Según contó, se burlaban de ella por no ser una chica demasiado agraciada. Cuando creció, dio de lado la crueldad que sufrió durante su adolescencia, y se convirtió en una mujer bastante atractiva. Sin embargo, su ambición por no convertirse en un juguete roto, le ha hecho resucitar su peor pesadilla. Después de comprobar que había fracasado como presentadora, probó suerte en los escenarios. En 2011 anunció su primer álbum profesional, en el que incluyó un tema de Laura Pausini. Tardó poco tiempo en renunciar a su nuevo sueño, pues el público no recibió muy bien este atrevimiento.
En 2016, desesperada por llamar la atención, descubrió su verdadero éxito: provocar la burla de los espectadores que, en el pasado, aplaudieron su talento. Leticia lanzó al mercado una polémica canción, La salchipapa. Las críticas que recibió fueron muy duras. Su nombre volvió a aparecer en los medios de comunicación, pero, únicamente, buscaban ridiculizarla. Sin embargo, Leticia no se vino abajo y, después de descubrir este filón, ha seguido sacando canciones que han provocado un gran revuelo. En un último videoclip, simula tener relaciones sexuales con Papá Noel. La antigua presentadora ha olvidado el daño que le hacían los insultos y, siempre que generen dinero, le provocan un enorme placer.
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Abdominales falsos, una reconstrucción de himen y unos párpados machacados
> Leticia Sabater a participado en casi todos los concursos de la televisión: Supervivientes, ¡Mira quien baila!, Esta cocina es un infierno, y una larga lista de programas que han hecho aumentar el dinero de sus cuentas bancarias. Además, antes de dinamitar su reputación, también trabajó en el teatro haciendo obras de bastante éxito. Lo cierto, es que ha sabido administrarse bien y, actualmente, tiene dinero de sobra para concederse más de un capricho. Casi todo lo que ha ganado, ha decidido invertirlo en su propio cuerpo. Después de descubrir que sus operaciones estéticas eran objeto de interés para muchos programas, Leticia Sabater no ha parado hasta someterse a las intervenciones más excéntricas del mercado.
Uno de los primeros escándalos estéticos que conocimos de ella, fue su reconstrucción de himen. Vendió esta operación en 2016, y en la entrevista en la que explicaba los detalles, aseguró que se había gastado más de 6.000 euros. Más adelante, acudió a Sálvame deluxe para enseñar sus nuevos abdominales. Este cambio fue recogido por todos los medios de comunicación, la audiencia se burló de ella, y los periodistas le recordaron lo triste que estaba siendo el final de su carrera. Sin embargo, encantada de recuperar protagonismo, Leticia ha seguido metiéndose en quirófano. Lo último que conocemos, es que se ha operado los párpados y ojeras. En lugar de esperar a que la operación hiciera efecto, reapareció machacada y llena de escandalosas marcas, todo por generar más impacto. ¿Qué será lo próximo que tendrá preparado?, ¿Estará detrás ella de la fiesta ilegal que han dado en su casa?