El clan de las Kardashians españolas está pasando por sus horas más bajas. María Teresa Campos observa destrozada cómo sus dos hijas se distancian cada día más. Para colmo, Terelu tiene que lidiar con la rebeldía de su hija Alejandra, que parece decidida a destronar a su madre. Todos los intentos de la colaboradora por alejar a su pequeña de los medios han sido en vano. Rubio se ha empeñado en vivir de su apellido y subirse al tren de en el que toda su familia está montada desde hace tiempo.
Una mala estudiante
> A la niña se le antojó estudiar Diseño de Moda. Terelu tendría que haber desembolsado unos 900 euros cada mes si su hija no hubiera abandonado el curso. Seguramente, Alejandra pensaba que se pasaría las horas muertas dibujando sus vestidos soñados, pero se equivocaba. Rubio tuvo que enfrentarse a complicadas asignaturas como Historia del Arte o Ecodiseño. Así, poco tiempo después de apoquinar los 2.000 eurazos que costaba la matricula, la joven decidió echarse para atrás y dejar de lado su sueño de ser modista.
¿Cuál era su nuevo reto? Nada más y nada menos que convertirse en una morena muy legal. Ahora, Rubio quiere ser abogada. Como todo hijo de mortal, la influencer debía presentarse a la selectividad para poder acceder a la universidad. Se ve que entre vídeo y evento de su ajetreada vida como it girl, le quedó poco tiempo para estudiar y suspendió la prueba en la convocatoria de junio. Por fortuna, en la recuperación del mes siguiente logró obtener un 6 de nota, aunque se trata de una calificación un poco baja teniendo en cuenta los estudios que quiere cursar. Es muy posible que Alejandra recurra de nuevo a mamá Terelu para que le financie su carrera en un centro privado, siempre que no se canse a mitad de año y vuelva a abandonar.
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La descarada hipocresía de Alejandra
> Rubio ha estado contradiciéndose a sí misma desde el minuto uno en el que se convirtió en una persona mediática. Nada más cumplir su mayoría de edad, se las dio de digna asegurando que no quería seguir los pasos de su madre para llevar una vida alejada de la televisión. Pocos días después, Alejandra y Terelu protagonizaron una de las portadas más polémicas de ¡Hola! Sin duda, un gesto bastante contrario a su supuesto deseo de mantenerse al margen de la farándula.
Pero la cosa no acaba ahí. Terelu le ha pedido hasta la saciedad que intente alejarse de la opinión pública todo lo que le sea posible. Campos solo quiere proteger a su hija de las feroces garras de los medios, pero Rubio se empeña en ser el centro de atención de forma continuada. La que no quería vivir del cuento y llevar una vida anónima es la misma que cada semana narra su día a día a través de un canal en Mtmad con miles de seguidores.
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Las malas influencias de Alejandra Rubio
> Por si todo esto fuera poco, Terelu podría no estar muy contenta con el grupo de amigos que ha elegido su hija. Una vez más, la chica que quería ser normal se terminó arrimando a personajes públicos de la talla de Aless Gibaja, Liz Emiliano o Yasmina de MYHYV. Juntos acuden a conocidas discotecas de la capital en la que se junta todo el famoseo madrileño, un ambiente que a Campos no le gusta un pelo porque sabe de sobra lo que ahí dentro se cuece.
Pero la amiga de Alejandra que más disgustos le ha costado a Terelu ha sido Oriana Marzoli. La ganadora de ¿Volverías con tu ex? acudió a Sálvame como invitada y se atrevió a cuestionar en pleno directo la valía de Campos como madre. La tertuliana se quedó atónita y no sabía dónde meterse. No se podía creer que una colega de su hija le hubiera soltado esa barbaridad. A partir de ese momento, Rubio se distanció de la venezolana y no ha vuelto a saber nada de ella, pero el daño ya estaba hecho.
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Alejandra muerde la mano que le da de comer
> Pero no fue esta la primera vez que Alejandra puso en jaque a su madre en su propio programa. La influencer acostumbra a echar pestes sobre Sálvame y el equipo del programa, mordiendo así la mano que le da de comer. En más de una ocasión ha tachado a los compañeros de Terelu de mentirosos y ha desmentido de muy malas formas las noticias que se emitían en el magacín. La última de ellas tenía que ver con su supuesta entrada en Gran Hermano VIP 7.
Rubio negó a través de su canal de Mtmad que un trabajador de la productora se hubiera puesto en contacto con ella para pactar su participación. Pero Kiko no se lo traga. El colaborador insiste en que sí se lo han ofrecido, aunque aclara que Alejandra no era consciente de que estaba hablando con un responsable de Zeppelin TV. «Los genes de la comunicación no lo has heredado», sentenciaba el tertuliano. La joven está dispuesta a participar en el reality show a pesar de saber de primera mano que a su madre no le haría ninguna gracia. Un nuevo varapalo al que Terelu tendría que hacer frente.
