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Estas son las razas de gatos que son más amigables 

Los gatos tienen fama de ser mascotas un poco ariscas, pero nunca es conveniente generalizar, ya que eso podría decirse también de según qué perros. Sí se podría decir que los primeros son animales más independientes y en ocasiones no disfrutan tanto de las muestras de afecto de sus amos, pero hay razas que pueden llegar a ser más amigables y cariñosas que otras. Esto es lo que vamos a intentar contarte en las siguientes líneas.

Gatos siameses

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El siamés es uno de los gatos más amigables

De los más cariñosos en la lista de gatos amigables habría que situar a los siameses, una variante que sí ama ser consentido y estar en familia. Es de los que más soporta la compañía de niños y es muy pacientes. Los siameses son extremadamente fieles y puede llegar a esperar en la puerta hasta que su amo llegue, y es que su capacidad de adaptabilidad es muy buena. Son equilibrados y atléticos, sus patas son esbeltas y las zarpas pequeñas y ovaladas. Hay dos variedades, por un lado el siamés moderno, y por otro el siamés tradicional o Thai.

Gatos birmanos

Estas son las razas de gatos que son más amigables 
Los birmanos tienen un pelaje extremadamente suave

Los gatos birmanos son muy elegantes y con un pelaje extremadamente suave. Su raza es de los más cariñosos ya que se adapta con facilidad al entorno y le encanta estar con su familia. Son de pelo semi largo de color más oscuro hacia las marcas distales, la cara, las patas, las orejas y la cola, y algo más claro en el resto del cuerpo. Es un animal relativamente grande, con un cuerpo rechoncho y de patas cortas. El birmano tiene los ojos azules y las cuatro zarpas de color blanco puro.

Los persas

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Los persa son conocidos como «aristocráticos»

Los persas son una raza de gatos caracterizada por tener una cara ancha y plana y un gran abundante pelaje de variados colores. Son considerados comúnmente como gatos aristocráticos (el 75% de los gatos de pedigree registrados son persas). Los primeros fueron introducidos en Italia desde Persia (actualmente Irán, Tayikistán y Afganistán) en la década de 1620 y a sus descendientes se les llamó de muchas maneras.​ La rama persa actual se desarrolló a finales de 1800 en Inglaterra y proviene del gato de Angora turco. Son muy elegantes y pelaje en diferentes tonalidades suaves. Es tranquilo y además coqueto, le gusta que lo consientan todo el tiempo, leal y de gran adaptabilidad.​

El criollo

Estas son las razas de gatos que son más amigables 
El criollo es de los más amigables y es gran compañero de los niños

Este tipo de raza de gatos sin duda alguna tiene versatilidad en su comportamiento, pero a pesar de esto, estos animales son de los más amigables en la lista. Su adaptabilidad es impresionante, siempre te acompañará donde estés, les gusta compartir con toda la familia y con los niños son grandes compañeros. El criollo está alejado del glamour de las especies de raza, pero sin embargo es un minino que tiene sangre noble. El también llamado gato callejero es el que proviene de aquellos primeros ejemplares que los egipcios domesticaron.

Scottish Fold

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El escocés Fold es dulce y dependiente de la familia

Los gatos Scottish (escocés) Fold son una raza de gato originaria de Escocia, Reino Unido, de una estructura ósea mediana y una gran musculatura. Posee pies redondos y una cola gruesa de tamaño medio. Su cabeza es muy redondeada, con las pequeñas orejas plegadas. La nariz es chata y corta y posee unos pómulos salientes. De pelaje único y suave, su carácter es dulce y dependiente de su familia por lo que le gustará estar siempre junto a alguien. Este gato disfruta de ser más consentido.

El ragdoll

Estas son las razas de gatos que son más amigables 
El ragdoll adora a sus dueños humanos

Es una de las razas de gatos más cariñosos y tranquilos. Es muy amable, incluso con las visitas y le encantan que los consientan. Su nombre significa muñeco de trapo. Es una raza originaria de Inglaterra, característica por su gran docilidad. Es más, adoran a sus dueños humanos​ y no les gusta estar solos. Mutaciones naturales y cruzamientos selectivos forzados entre razas muy domésticas como el siamés, el persa y el Sagrado de Birmania han privado a este animal de cualquier instinto de caza, alerta o defensa. Reacciona poco al peligro, se muestra dócil y tranquilo. Es un gato exclusivamente casero y dependiente.

El somalí

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El somalí puede pasar horas entretenido con sus juguetes

Los gatos somalís son de constitución media: firme, ágil y musculado. La cabeza tiene forma de media cuña con contornos suaves y las orejas están bastante separadas y tienen mechones. Los ojos tienen forma almendrada y están bastante separados. Es un gato muy activo e inteligente. Le encanta curiosear por todos lados y jugar, sobre todo con los niños. Es tan juguetón que puede pasar las horas entretenido con sus juguetes. Convive muy bien con otros felinos.