A las napolitanas las relacionamos sobre todo con la crema o el chocolate, productos con las que pasan como postres o dulces, pero cada vez hay más recetas en las que su ingrediente principal es algo salado, ya sea bonito o jamón y queso, e igualmente están deliciosas para desayunar o para merendar. Lo mejor de todo es que se pueden hacer perfectamente en casa y que en 20 minutos podemos tener 6 calentitas en nuestra cocina. Eso sí, para el hojaldre lo mejor es comprarlo hecho porque hacer la masa casera es muy difícil y las masas que venden hechas son muy ricas.
Origen de la napolitana
No está nada claro el origen de la palabra napolitana. La cultura popular siempre las ha llamado así, pero en la gran mayoría de los idiomas es conocido este característico dulce como pain au chocolat, hecho con la misma masa que los croissants, dando referencias francesas de su verdadero origen. Asimismo, en parte de Navarra y el País Vasco a las napolitanas se les conoce como «garrotes». Dada la forma que tiene el pastel, podría resultar posible que la etimología de su nombre se remonte hasta principios del siglo XVI y tenga que ver con la Napolitana mencionada en una copla del poema «Carajicomedia«.
Quién creó la napolitana
Como queda dicho, la napolitana, a pesar de lo que pueda parecer por su nombre, es un invento francés que se atribuye a un hombre llamado Morize en 1819, aunque hay pruebas escritas sobre cómo preparar café con este método que se remontan a 1691. Patricia Nápoli Alfieri asegura sin embargo que el plato nació en el restaurante de su familia en los años 40, por obra de su abuelo. La verdadera historia detrás de una leyenda porteña que dice que en un restaurante de la ciudad de Buenos Aires llamado Nápoli, a un cocinero amateur se le quemó la milanesa y, para subsanar el percance, el dueño del local ordenó que se la cubriera con salsa de tomate, fetas de jamón y mozzarella.
Ingredientes de la receta
Aunque hemos dicho que la napolitana por lo general se rellena de crema o de chocolate, para hacer unos dulces que casi se comen solos, para hacer nuestra receta los ingredientes que vamos a necesitar para, por ejemplo, hacer seis, son una plancha de hojaldre, 3 lonchas de jamón york, 3 lonchas de queso, una yema de huevo y queso rallado. Como se puede ver, productos todos ellos muy sencillos de conseguir, por lo que tampoco perderemos mucho tiempo en ello, y muy económicos, por lo que este bocado no nos costará mucho dinero.
Cómo hacerlas
El primer paso para hacer esta napolitana de jamón y queso será cortar la plancha de hojaldre que como hemos dicho es preferible adquirir ya hecha, en rectángulos de 14 cm x 8 cm. Se pone media loncha de jamón york encima de las mismas medidas y se hace lo propio con el queso y vamos formando las napolitanas. Se doblan hacia nosotros, pero no hasta el final, tenemos que dejar 1 cm de margen. Se dobla hacia delante para cerrarla y se pintan de huevo (solo usaremos la yema). Se ponemos un poco de queso rallado por encima y se meten al horno a que suban las napolitanas y se hornean unos 10 minutos por arriba y por abajo a 200º.
Imprescindible para los negocios
Lo que está claro es que la napolitana, que también tiene su particular historia en España, ya que son muchos los que aseguran que el término hace alusión a Isabel I de Castilla (que ostentaba el título de reina de Nápoles desde 1504) en un gesto de mofa y sátira hacia ella, es un producto que debes incluir sí o sí en tu negocio, tanto porque permite una gran rotación, para desayunos o para meriendas como porque resulta muy fácil de manipular gracias a las ventajas de los productos de panadería congelados, que con rápido golpe de horno están deliciosos, y vienen ya decorados para facilitarte todavía más la vida.
Top de ventas
Y si los anteriores detalles de una napolitana por encima de todo hay que destacar que es un producto que gusta a todo tipo de público (tanto niños como adultos) por su facilidad a la hora de comer y por sus rellenos generosos (los que se hacen con algo más de calidad), que enamoran a quienes las prueban.
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