El kéfir, para todo aquel que no sepa de qué estamos hablando, es uno de los muchos alimentos probióticos que son recomendados por sus propiedades y por los efectos que este puede ejercer sobre la salud. Sin embargo como ocurre en todos los alimentos, este también puede llegar a tener efectos secundarios, por eso es importante saber en cuáles casos está contraindicado, para ver si puedes tomarlo si tienes algún problema de salud. En las siguientes líneas vamos a decirte cuáles son y también las propiedades positivas que tiene el tomarlo, para que pongas en una balanza los pros y los contras para ver si puedes o no ingerirlo sin problema alguno.
Los dos kéfir
Hay que partir de que hay gran diferencia entre tomar kéfir casero o envasado. La mayoría de los efectos secundarios que se presentan después de consumirlo se producen cuando se ingiere un producto casero, pues los preparados en casa suelen ser mucho más concentrados que los que se pueden adquirir comercialmente. A pesar de que sus propiedades suelen ser beneficiosas para el funcionamiento del sistema digestivo, existen muchas personas que tienen un estómago o intestino delicado, lo que puede provocar una serie de molestias, como por ejemplo, inflamaciones, dolor o diarrea. En caso de presentarse cualquiera de estos síntomas es importante evitar su consumo y acudir a un médico.
El calcio del kéfir
El kéfir contiene una gran cantidad de calcio, un mineral que puede interferir con la absorción de algunos medicamentos, como es el caso de los Fluoruros, Inhibidores, Tetraciclinas o Bifosfatos. En este caso es importante consultar primero con el médico, aunque en la mayoría de los casos no requiere evitar su consumo por completo, ya que se suele sugerir consumirlos como mínimo 2 horas antes y 2 horas después de la ingesta de dichos medicamentos.
Malo para personas inmunodeprimidas
Antes de consumir el kéfir hay que tener muy en cuenta qué tipo de persona se trata, ya que muchas de ellas se ven obligadas a consumir medicamentos que reducen la fuerza del sistema inmunológico, como por ejemplo quienes padecen artritis reumatoides o lupus. Al tratarse el kéfir de un alimento que se integra por levaduras y bacterias, las cuales son controladas generalmente por el sistema inmunitario, se recomienda evitar su consumo, ya que el debilitamiento de dicho sistema puede dar lugar a distintas infecciones que pueden dañar seriamente tu organismo.
La candidiasis no ayuda
El kéfir contiene levaduras que combaten a las llamadas levaduras patógenas, pero en el caso de las personas que padecen sensibilidad a las levaduras pueden ocasionar algunas molestias. Por ese motivo las personas que ha sufrido alguna infección por candidiasis deben consultar también primero con su médico antes de consumirlo para ver si pueden o no hacerlo, ya que esto varía en función del paciente.
Contraindicado con coagulantes
El kéfir, como cualquier otro alimento, puede generar efectos adversos cuando se abusa de su consumo, por eso es recomendable consultar a un médico y a un nutricionista paras conocer cuál es la cantidad correcta que se debe ingerir en cada uno de los casos. Por ejemplo, otro de los minerales que resaltan en sus propiedades es la vitamina K, la cual puede ser perjudicial en personas que están bajo tratamiento con anticoagulantes. El sida también produce un debilitamiento en el sistema inmunitario y aumenta el riesgo de padecer candidiasis, por tal motivo es importante consultar previamente a un especialista antes de ingerirlo, pues este puede producir distintos tipos de infecciones.
Ventajas de tomarlo
Hay que tener en cuenta que el kéfir, pese a todo, está catalogado como un alimento «saludable» del siglo XXI, es un alimento probiótico que contiene muchos compuestos bioactivos, incluyendo hasta 30 cepas de bacterias buenas que ayudan a combatir tumores, microbios dañinos, carcinógenos y más. Esta bebida envasada con nutrientes y probióticos no solo se ha relacionado con una serie de beneficios de kéfir, sino que también puede ser la clave para mejorar muchos problemas de salud relacionados con la salud digestiva y la función inmunológica. Entre sus principales ventajas está que aumenta la inmunidad, construye la fuerza de nuestros huesos, apoya la digestión y combate el SII, sana la piel u mejora los síntomas de intolerancia a la lactosa. El kéfir de leche es el tipo de bebida más conocida y ampliamente disponible, que generalmente se vende en la mayoría de los supermercados principales y en casi todas las tiendas de alimentos naturales. Se hace mayormente con leche de cabra, de vaca o de oveja, pero también de leche de coco.
