La relación entre la cantante colombiana, Shakira, y el defensa del Fútbol Club Barcelona, Gerard Piqué, no podría estar peor. Algo que hemos podido comprobar en el tirante encuentro que ha tenido esta semana la expareja (nunca se llegaron a casar porque la de Barranquilla quería, «mantener la fruta de la pasión»). Y es que ni por su hijo acceden a sentarse juntos públicamente.
Cada uno en una esquina del campo
> A pesar de su separación la wakaexpareja tiene dos hijos pequeños, Milan (9) y Shasha (6), que necesitan el apoyo y el cuidado de sus padres. Y eso es una cuestión que tanto Shakira como Piqué tienen muy en cuenta. Si no que se lo digan a los espectadores del mayor torneo juvenil de beisbol de Europa en el que jugó el mayor de los hermanos, Milan, en la República Checa, y que contó con la asistencia de una madre aparentemente animada y entusiasmada con los logros de su niño, y de un padre con cara de pocos amigos, que no está pasando su mejor momento.
Un partido al que no sabemos si viajaron juntos o separados. De hecho, una revista publica que fueron juntos en un jet privado y se alojaron en un hotel de lujo en la misma ciudad. Sin embargo, otras informaciones que comparte otra publicación apuntan que Shakira voló con los dos pequeños, mientras que el catalán lo hizo por su cuenta. No obstante, lo que si está claro es que ambos dos vieron el partido por separado e intentaron mantener la compostura. Aunque a Shakira se le dio mejor.
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