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El arroz con langostinos que está tan rico como el de bogavante

Para preparar un buen arroz no hay una época especial, por mucho que algunos asocien, por ejemplo, la paella con el veraneo, quizás por aquello de tomar una en un chiringuito playero o en en cualquier campo habilitado para hacerla. Lo bueno de éste es que lo mismo se puede preparar hervido en blanco que con tropezones, como este con langostinos o en la citada paella alicantina, el clásico arroz con pollo o un arroz negro con sepia y gambones, entre otros. En cualquiera de sus variantes vamos a tener un plato rico y que tiene la ventaja de que gusta a casi todo el mundo y que es de aprovechamiento estupendo, ya que podemos hacerlo lo contundente o ligero que queramos. 

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El sofrito

Lo primero es hacer un buen sofrito

Para empezar nuestro arroz con langostinos lo primero es pelar y picar finamente los ajos. Se puedes retirar el gérmen si queremos suavizar el sabor, pero no es necesario ya que la cantidad de ajo es bastante pequeña y su sabor no sobresale por encima de los demás. Luego se pela y pica la cebolla en brunoise y se lavan y retira las semillas del pimiento y se pican también en brunoise. Una vez listos los ingredientes del sofrito, se viertes una pequeña cantidad de aceite de oliva en la sartén, suficiente para cubrir la base, y lo sofreímos todo junto a fuego bajo.  Antes de que adquieran color, se agrega la salsa de tomate, se remueve, se sazona y se deja cocer durante un par de minutos.