Las informaciones sobre la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin se suceden a un ritmo vertiginoso. Desde que el pasado miércoles la revista Lecturas publicara en su portada unas comprometidas imágenes del exjugador de balonmano en actitud cariñosa con una compañera de trabajo, Ainhoa Armentia, no se habla de otra cosa. Iñaki, Ainhoa y la hija pequeña de Don Juan Carlos y Doña Sofía, abren no solo los espacios de la prensa rosa sino todas ediciones de los informativos.
Desde entonces, silencio absoluto por parte de Doña Cristina, que continúa en Ginebra y, según su entorno, está «hecha polvo». La que fuera Duquesa de Palma está completamente desaparecida, aunque con su madre, la Reina Sofía, a su lado.
La Infanta se ha mudado de casa ante el escandalo
>No es algo nuevo en la Reina Sofía, ya que en otras ocasiones ha demostrado que el apoyo a su hija es incondicional. Ahora todavía no se sabe nada de la griega. ¿Por qué no se ha visto todavía a esa madre llegar?
Cristina de Borbón dejó su casa de 12 habitaciones en Ginebra donde vivía con los escoltas a una casa distinta, ya que, solo vive allí con la pequeña Irene.
Al parecer la zona en la que vive es una zona más céntrica con más vida ya que a ambas les gusta salir y entrar. Desde entonces, son muy pocos los que conocen el verdadero hogar familiar de la que trabaja para Fundación La Caixa y la Fundación del Aga Khan. Además, ha coincidido con que puede teletrabajar y todavía no se ha visto a Irene ir a clase. ¿Estará dando las clases de forma virtual o puede estar entrando de una manera muy cuidadosa?
A estas alturas, lo más normal es que esa Sofía madre, esté apoyando y alegrando, a su hija. Y seguro que, como muy tarde, el miércoles veamos alguna imagen de Cristina de Borbón.
