Las personas más golosas saben apreciar lo que es un rico flan casero, y una de sus variantes más exquisitas es el flan de café. Este postre tiene una consistencia muy ligera y fresca para consumir durante el verano y es ideal para servir cuando hay invitador en casa. A continuación, te mostramos la receta más fácil para que puedas disfrutarlo cuando quieras.
Los toques finales
Se reparte la mezcla entre las cuatro flaneras y se introducen en una fuente de horno. Se llena con agua caliente, cubriendo un tercio de la altura de los moldes, y se cuece al baño maría en el horno, precalentado a 180 ºC con calor arriba y abajo, durante 25 minutos.
Se retira y se deja enfriar a temperatura ambiente antes de traspasar a la nevera. Se espera hasta el día siguiente para desmoldar y servir. Se puede acompañar con almendra granillo y nata montada o decorar con hojas de menta fresca, pero consumirlo sin más también es estupendo.
