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miércoles, 8 mayo 2024

Elsa Pataky y Chris Hemsworth: todo lo que demuestra que su matrimonio no es tan bonito como parece

Elsa Pataky y Chris Hemsworth son noticia una vez más. Aumentan su gran patrimonio comprando una propiedad en España, país de nacimiento de la actriz, concretamente en Madrid, donde ya tienen otro inmueble. Todos los medios recogen lo mismo, una pareja feliz que invierte en ser aún más feliz. Lo que algunos no recuerdan es que como otro matrimonio cualquiera también tienen sus discusiones, los altibajos han sido constantes a lo largo de estos años, y aunque sigue triunfando el amor, ellos mismos lo han asegurado en diversas ocasiones: no son, ni por asomo, una pareja perfecta, hoy en día siguen trabajando en su relación y así lo quieren hacer saber. Si deseas saber cuáles han sido esos puntos que han desgastado su relación en algún que otro momento pero que finalmente han logrado superar con éxito no te pierdas nada y continúa leyendo, te contamos esto y mucho más a continuación.

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Mirados con lupa: recientes polémicas y controversias que les han perjudicado

> Usar demasiado las redes sociales no les ha beneficiado en muchos momentos. «¡Divirtiéndose con los niños! No se preocupen, que no son de verdad», publicaba Elsa hace no mucho junto a una fotografía donde se veían los pies de toda la familia con un tatuaje. La polémica no se hacía esperar y muchos comentaban la irresponsabilidad que habrían cometido como padres. La polémica volvería una vez más pues una publicación de la madrileña en redes donde uno de sus hijos escalaba el frigorífico hacía cundir el pánico entre sus seguidores que calificaron de altamente peligroso.

Las controversias sobre su estilo de vida han sido constantes en estos meses. En su última visita a El Hormiguero Elsa Pataky confesaba los secretos del cuerpazo de escándalo que lucía. Y es que llevaba a cabo una especie de dieta muy de moda entre las famosas. El ayuno intermitente, el cual consistía en no comer durante 16 horas y comer sano durante el resto. «Vergonzoso» y «barbaridad» fueron los adjetivos más demandados para opinar sobre lo que estaba recomendando en riguroso directo. Aún así, se reafirma en sus palabras pues según ella es una práctica «antiedad, muy saludable para el cuerpo».

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