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La extraña decisión de poner los ojos azules a su nieta y los caprichos más absurdos de Isabel Pantoja

Cada día sabemos más sobre Isabel Pantoja, sus manías, extravagancias y caprichos nos tienen asombrados. Kiko Rivera ha desvelado alguna que otra salida de tono de su madre. Las cuales aún no conocíamos y que le avergüenzan profundamente en su entrevista más esperada para Domingo Deluxe. En Cotilleo nos hemos puesto las pilas y hemos averiguado algún que otro secreto más que guarda a buen recaudo la tonadillera. Ahora sabemos que la finca de Cantora esconde tras sis paredes asuntos reservados que ha intentado ocultar durante años pero que poco a poco conseguimos descifrar. Además hemos descubierto que a parte de tener una gran obsesión con el dinero es una despilfarradora nata. Si quieres conocer este y otros aspectos ocultos de su vida sigue leyendo. Te lo contamos todo a continuación.

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El ritual que lleva a cabo antes de un concierto

> Rarezas y más rarezas. También sobre el escenario y antes de salir a él Isabel Pantoja tiene diversas manías y rituales. El coreógrafo Poty contaba en exclusiva hace unos años cuáles eran sus hazañas antes de cantar: “Es de una concentración extrema antes de salir al escenario, hace todo un rito. Siempre me ha llamado la atención el rigor y la disciplina que tiene antes de salir al escenario (…) Aparte de, como la gran mayoría de folclóricas, tener sus vírgenes y demás, en ese momento de recogimiento no puedes hablar con ella hasta que pisa el escenario. Además, se comporta como un témpano de hielo”

Sálvame quiso ir más allá y con estas declaraciones consiguió más información sobre lo que no podía faltar en los camerinos de Isabel antes de salir a actuar: “Que el camerino tenga una decoración que genere un espacio agradable«. Es lo primero que nos sorprende pues Isabel Pantoja huye de espacios cerrados sin grandes ventanales ya que le recuerdan a su privación de libertad cuando estuvo en prisión. «Cuatro litros de agua con gas y otros cuatro litros de agua sin gas. Que al camerino no le falte comida: como queso, jamón de jabugo, fruta, sándwiches… Un baño en suite dentro del camerino. Velas y rosas blancas. Un espejo de cuerpo entero y un tocador con muchas bombillas”.

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