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Arantxa de Benito y Guti: del cielo al infierno

La presentadora Arantxa de Benito y el jugador de fútbol José María Gutiérrez, más conocido como Guti, fueron una de las parejas más perseguidas por los periodistas. Ambos tenían unas profesiones que respaldaban su presencia mediática. Pero, los medios de comunicación ensalzaron su papel como personajes de entretenimiento, convirtiéndolos en una pareja muy cotizada en la crónica social. Las idas y venidas de la pareja hicieron que su relación fuera un tema recurrente en las tertulias televisivas. Fueron pioneros en tomar una decisión: divorciarse en secreto. Después de esta noticia, decidieron andar en solitario. Y, aunque pudiera ser lo mejor para ellos, esta decisión supuso el fin de aquella etapa donde todo lo que hacían se convertía en noticia. Prácticamente nadie sigue sus pasos, especialmente los de Arantxa, quien estuvo muy tiempo retirada de la televisión. ¿Quieren saber cómo consiguió volver? , ¿Cómo se toma Guti su decadencia mediática?

 

 

 

 

Romina ha terminado de hundir públicamente a Guti 

Romina y Guti posando para los medios > Desde que Guti dejó de ser futbolista y se convirtió en entrenador, los medios de comunicación empezaron a dejar de seguir sus pasos, especialmente cuando se fue a Turquía. Su matrimonio con Romina Belluscio de devolvió a la crónica social, aunque su presencia en los medios duró muy poco tiempo. El nacimiento del primer hijo que tuvo con la modelo, y la elegante boda que celebraron, si ocuparon las portadas de muchas revistas. Pero, Guti no ha vuelto a tener la escandalosa fama que consiguió con su exmujer, Arantxa de Benito. De hecho, el segundo embarazo de Romina ha pasado inadvertido para gran parte del público. Muchos medios pusieron más interés en la modelo que en él. 

Guti ya no es futbolista, ni siquiera es entrenador, ya no participa de la vida pública. Tampoco se ha preocupado por cebar su intimidad para que le resulte interesante a los periodistas. Posiblemente no tenga necesidad económica de hacerlo, como si puede ser el caso de Arantxa. Por ello, a la presentadora le interesaba mantener el vivo el conflicto con su exmarido. Cuando Romina entró a defenderle, se llevó todo el protagonismo. Nadie se interesó por conocer la versión de Guti. Es un personaje olvidado para la crónica social, secundario en los conflictos y prácticamente inexistente en las portadas de revistas. ¿Le ayudará el revuelo que ha ocasionado la fiesta ilegal de su hija mayor a que su nombre vuelva a sonar en televisión?