Ha pasado casi un año desde que Enrique Ponce y Ana Soria hicieran público su amor y la pareja ha decidido que ha llegado el momento de dar un paso más en su relación. Con la llegada de un bebé, Paloma Cuevas ha quedado definitivamente en el olvido. Jaque mate, Paloma.
Jaque Mate, Paloma
> Entramos en diciembre y eso solo significa una cosa: Enrique Ponce y Ana Soria están cerca de cumplir un año desde que hicieron oficial su relación. La pareja ha luchado contra viento marea porque su relación saliera adelante, pues ni las críticas ni los rumores de ruptura han impedido que vayan formando una pareja estable. Tal es así que a la estudiante de derecho le ha importado muy poco cambiar de universidad para mudarse a vivir con el que hoy por hoy es el amor de su vida.
Así de feliz lo muestra Ana Soria en sus redes sociales, una pasión que al parecer comparte con el torero. Ambos, publican su amor, sus viajes idílicos y sus quedadas con amigos, aunque esto haya supuesto en más de una ocasión un problemón con Paloma Cuevas. Cabe recordar que, por petición expresa de la empresaria, el torero tuvo que dejar de publicar fotografías con su pareja, con la finalidad de que las niñas que tienen en común no tuvieran que ver a su padre “al lado de otra mujer diferente a su madre”. Pero todo esto ha pasado ya a un segundo plano, y la pareja proclama a los cuatro vientos su amor. De hecho, hace tan solo unas horas han compartido una imagen que ha vuelto locos a todos sus seguidores: la pareja ha dado un paso muy importante en su relación y han decidido aumentar la familia.
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