Kiko Rivera es, sin duda, el personaje del momento. No tanto por la depresión que ha confesado padecer sino por el enfrentamiento público y mediático que mantiene, hace casi dos semanas, con su madre, Isabel Pantoja. El trasfondo de este distanciamiento serían los problemas económicos del Dj y la negativa de la tonadillera tanto a darle más dinero para solucionarlos, como a su oposición a la posibilidad de poner en venta Cantora – que Kiko recibió en herencia de Paquirri y cuyo usufructo tiene la artista – para olvidarse para siempre de sus deudas.
Mientras que la familia Pantoja – encabezada por Isa y por Anabel Pantoja – prefieren no posicionarse en este conflicto, la familia Rivera todavía no se ha pronunciado al respecto. Con Francisco y Cayetano «desaparecidos», hemos preguntado al hermano de Paquirri, Antonio Rivera, qué le parece que su sobrino Kiko esté dispuesto a deshacerse de Cantora – emblema y sueño del fallecido torero – para saldar sus deudas económicas.
Antonio Rivera, normalmente hablador y amable con la prensa, prefiere en este caso guardar silencio y dar una tensa callada por respuesta a la posibilidad de que Isabel Pantoja y su hijo Kiko vendan la finca de su hermano Paco.
Muy discreto, Antonio, negando con la cabeza, también prefiere no pronunciarse sobre el sosprendente enfrentamiento público de la tonadillera y su hijo.