Mila Ximénez está pasando por el momento más difícil de su vida cuando hace unas semanas la diagnosticaron un cáncer. Desde entonces ha desaparecido de la vida pública para someterse al duro tratamiento y luchar por su recuperación. Sin embargo, el mazazo que ha supuesto la muerte del marido de Paz Padilla, a consecuencia también de un cáncer, y el mensaje de Mila denota que no se fía y que puede condenar su estado de ánimo.
No es la mejor terapia
La situación no es la mejor para Mila Ximénez y su ánimo. Las palabras de apoyo a Paz Padilla denotan también una profunda tristeza, nada recomendable para la lucha y la recuperación.
Además, Mila es muy sentida y tendente a mostrar sus sentimientos de manera clara. Pero no hay podido esta vez siquiera estar en el plató de Sálvame, junto con todos sus compañeros en el homenaje que le hicieron a la andaluza ayer, ni tampoco en el entierro ayer en Zahara de los Atunes.
