Mila Ximénez ha conseguido dejar a un lado sus deseos de marcharse de Guadalix de la Sierra y se ha convertido en una de las tres finalistas de la séptima edición de GH VIP. La colaboradora se ha abierto en canal y parece que la jugada no le ha salido del todo bien pues la visita de su hija, Alba Santana en Guadalix de la Sierra, ha sido objeto de críticas y burlas en las redes sociales. ¿Qué medidas tomará la colaboradora una vez salga? A continuación, te contamos todo con pelos y señales.
Una visita con consecuencias
> Era una de las visitas más esperadas. Mila Ximénez ha conseguido estar dentro de las tres finalistas y eso que, durante los tres meses de concurso, no ha habido día en el que no haya deseado irse de Guadalix de la Sierra. La colaboradora de Sálvame deseaba con todas las fuerzas recibir una visita especial, consciente de que su hija, por trabajo y distancia, no acudiría a la casa. Pero estaba muy equivocada. Alba Santana acudió a GH VIP.
“No te he hecho caso y he venido, tenía que verte. Te echo mucho de menos. Mamá, todos están bien. Tus nietos te ven tanto… Están todo el rato viéndote. Solo les he puesto lo bueno y les encanta. No importa a dónde llegues, me has demostrado muchas cosas. De lo de fuera no te preocupes, todo sigue como lo dejaste. La que está viviendo algo único eres tú, nosotros seguimos igual”, le confesó Alba a su madre. Pero parece que esta visita que fue de lo más especial para los telespectadores, se está convirtiendo en la peor de las pesadillas para la única hija de Mila.
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