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Escándalo: La vida de lujo de Iñaki Urdangarín en prisión

La concesión del permiso penitenciario del marido de la infanta Cristina ha dado mucho que hablar. Iñaki Urdangarín saldrá de la Prisión de Brieva dos veces a la semana, los martes y los jueves, durante ocho horas, para llevar a cabo labores de voluntariado en el Hogar Don Orione. En los últimos días se ha estado especulando sobre un supuesto trato de favor del que se habría beneficiado el deportista. Ahora, se han destapado los lujos a los que el cuñado del rey ha tenido acceso durante su condena. Se trata de unas opulencias que no están al alcance de cualquier preso, generando así un enorme revuelo entre la opinión pública. Sigue leyendo para conocer todos los detalles sobre esta polémica.

La peor pesadilla de Iñaki

Escándalo: La vida de lujo de Iñaki Urdangarín en prisión

> Por desgracia para él, hay quien se ha cansado de este supuesto trato de favor y ha decidido poner contra las cuerdas al marido de doña Cristina de Borbón. La Fiscalía Provincial de Valladolid recurrió la semana pasada la sentencia del Juzgado de Castilla y León por la que se concedía el permiso penitenciario del que actualmente goza Urdangarín. Según el documento, el empresario “no cumple con los requisitos legales” para disfrutar de este tipo de concesión. De hecho, recalca que ni siquiera ha alcanzado el cuarto de su condena, de cinco años y diez meses de prisión.

Además, la Fiscalía echa por tierra la versión del juez que autorizó el permiso de Urdangarín. El togado argumentó su decisión asegurando que la situación de aislamiento impuesta por la Administración estaba pasando factura al estado de salud del empresario. Sin embargo, en el recurso se asegura que fue Iñaki quien eligió la prisión donde cumpliría su condena, con conocimiento pleno de las condiciones en las que se desarrollaría su internamiento. Por si fuera poco, niega la existencia de cualquier reconocimiento médico o psicológico que atesoren las palabras del magistrado. Así, es más que probable que se cumpla la peor de las pesadillas del empresario: que se revoque la concesión de la que ahora disfruta.