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lunes, 6 mayo 2024

El enemigo número uno de Casa Real airea los trapos sucios de Letizia

Casa Real siempre hace todo lo posible por guardar todos sus trapos sucios en secreto, alejados de las miradas indiscretas. Sin embargo, en esta ocasión no ha podido contener la lengua de uno de sus mayores enemigos, que ha despotricado bien a gusto contra la institución más poderosa de nuestro país. Los reyes están que trinan tras escuchar estas declaraciones que han sacado a la luz todos sus secretos y problemas conyugales. ¿Quieres conocer las confidencias más ocultas de Felipe VI y Letizia? Sigue leyendo para descubrirlas.

El matrimonio que hace agua

El enemigo número uno de Casa Real airea los trapos sucios de Letizia

> Ya han pasado unos cuantos años desde que Felipe presentó a Letizia como su prometida. Por aquel entonces, su amor estaba a flor de piel y a los dos se les podía ver ante los medios como unos tortolitos adolescentes. Pero mucho ha llovido desde esos gloriosos años. Ahora, el matrimonio de los reyes hace agua y presenta serios problemas que deben solucionar cuanto antes. Cuando la prensa está presente, ambos se esfuerzan en simular cariño y armonía, pero la cosa cambia mucho de puertas de Zarzuela para adentro. De hecho, incluso en público se les ha escapado alguna mala mirada o un gesto despreciable hacia su pareja. La paciencia se les está acabando.

El principal problema podría radicar en el fuerte carácter de Letizia. La reina sabe lo que quiere y no está dispuesta a que nada ni nadie le dicte cómo ha de actuar o qué tiene que decir en cada momento, ni siquiera los consejeros de la corona. A Felipe no le gusta nada esta actitud y la ha llegado a corregir varias veces en público, algo que ha sacado de quicio a la consorte. Ahora, su enemigo número uno ha revelado todas las veces en las que el Borbón ha cantado las cuarenta a su esposa, y lo cierto es que son muchas más de las que nos imaginábamos. Sigue leyendo para descubrir todas las broncas que han protagonizado los monarcas españoles.

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El enemigo de la corona airea sus trapos sucios

El enemigo número uno de Casa Real airea los trapos sucios de Letizia

> No podía ser otro que Jaime Peñafiel. El periodista especializado en realeza ha dejado temblado a palacio en más de una ocasión con sus tremendas declaraciones. En esta ocasión, ha revelado que Felipe tiene entre ceja y ceja a Letizia y que ya no le pasa ni una. El rey no se muerde la lengua a la hora de propinarle una buena reprimenda siempre que sea necesario, incluso aunque cientos de reporteros les estén apuntando con sus cámaras. Una de las más graves tuvo lugar en Asturias, según ha podido saber El Español. Al parecer, al Borbón se le acabó la paciencia con su mujer y no le habló de muy buena forma, dejando atónitos a todos los allí presentes.

Los monarcas estaban disfrutando de una representación del baile típico asturiano, que corría a cuenta de un grupo de niñas. Pero solo uno de los reyes estaba prestando verdadera atención al espectáculo. Mientras las jóvenes se esmeraban en clavar cada paso, Letizia estaba de cháchara con un amigo, pasando olímpicamente de la actuación. Esta actitud de indiferencia sacó de quicio a Felipe VI, que no dudó en pedirle «respeto» y le exigió que se estuviera quieta mientras que las chicas ponían todo su esmero en impresionar a sus majestades. Ortiz se quedó a cuadros. Pero lo que de verdad revienta al Borbón es la vulgar adicción que recientemente ha adquirido su mujer.

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La adicción de Letizia que Felipe no soporta

El enemigo número uno de Casa Real airea los trapos sucios de Letizia

> Pero de todos los comportamientos cuestionables de doña Letizia, hay uno que Felipe VI no pude soportar, de ningún modo. Se trata de una vulgar adicción que la reina ha adquirido recientemente. La consorte no es capaz de separarse de su teléfono móvil, ni siquiera en los actos institucionales más importantes. Ortiz sabe muy bien cómo manejarse ante los medios y nunca se la verá portando su terminal durante los posados oficiales, pero una vez que se cierran las puertas del evento y la prensa desaparece, la consorte no aparta su mirada de la pequeña pantalla. El monarca no ve con buenos ojos esta dependencia, y así se lo ha hecho saber en más de una ocasión.

Una de ellas tuvo lugar en México, en el año 2015. Según ha podido saber el medio citado anteriormente, el presidente de país los invitó a una cena oficial con diferentes autoridades estatales. Durante la velada, el jefe del ejecutivo se lanzó a leer un discurso ante todos los presentes, pero a Letizia parecían no interesarle mucho las palabras del mandatario. Ni corta ni perezosa, la consorte sacó su teléfono móvil y empezó a chatear con otra persona. En cuanto se percató, Felipe VI le llamó la atención y le hizo saber que acababa de protagonizar una tremenda falta de respeto. Aquella no fue la primera vez que el Borbón se sonrojó por culpa de su mujer, y de seguro que no será la última.

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La trifulca de Letizia con una funcionaria

Letizia Ortiz

> Dicen que la curiosidad mató al gato, y algo así es lo que le ocurrió a doña Letizia durante su viaje a México. No contenta con su incidente con el teléfono móvil, Ortiz volvió a liarla cuando estaba de visita en una importante biblioteca. Interesada en descubrir más sobre aquel majestuoso lugar, la consorte se separó del grupo y decidió explorar el edificio por su propia cuenta. De entre todos los libros que reposaban en las estanterías, a la soberana le llamó la atención un antiguo volumen que no dudó en acercarse a manosear. La sorpresa dela guía fue mayúscula cuando se percató de la insolencia de la reina.

Al parecer, sobre ese libro pesaba una protección especial y no estaba permitido que los visitantes se acercaran a tocarlo, por mucho que seas la reina de España. La funcionaria no dudó en abroncar a Letizia por su atrevimiento, ante la avergonzada mirada de Felipe VI, que no sabía dónde meterse. Teniendo en cuenta todos los malentendidos que se han producido entre ellos, resulta obvio que los monarcas no están pasando por su mejor momento como matrimonio. Algunas voces cercanas a Casa Real han llegado a pronunciar la palabra divorcio, pero parece improbable que Ortiz se atreva a dar el paso: tiene mucho que perder.