Kiko Matamoros atraviesa uno de sus peores momentos. Aunque sonríe y asegura que todo está bien, la realidad es muy diferente. Las cosas no han salido como esperaba y la vida no le sonríe. Se separó para ser libre y sigue enganchado a Makoke. De ahí que quiera vengarse utilizando una peligrosa estrategia que puede explotarle en la cara. El asunto está al rojo vivo. ¿Qué está pasando? Te lo contamos todo a continuación.
Kiko Matamoros: días de furia
> La separación entre Kiko Matamoros y Makoke no está resultando lo apacible que se preveía. El colaborador de televisión aseguró que rompía con la mujer de su vida “queriendo mucho”. Todo se precipitó cuando Makoke descubrió ciertos aspectos de Kiko que desconocía. Entre otras cosas, que hacía unos dos años mantenía una relación sentimental paralela. También se habló de dinero, el que habría destinado a sufragar los gastos de la tercera en discordia.
Aunque destrozada, Makoke aseguró que su deseo era llevarse bien con Kiko. A sus espaldas, veinte años de relación que habían dado como fruto a una hija, Anita. Es precisamente la joven quien peor lo está pasando al ver la deriva de esta separación. Mientras ella estudia en Milán, su padre se dedica a hacerle la vida imposible a su madre. Y como todo puede ir a peor…
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La peligrosa venganza de Kiko contra Makoke
> Matamoros asegura que se le han hinchado las narices y que va a por Makoke. A tal efecto, quiere hacer constar en la Agencia Tributaria que hay dos propiedades, una en Majadahonda y otra en La Finca, ambas a nombre de Makoke, que son suyas de una manera encubierta. El colaborador de televisión cuenta que dispone de los documentos que probarían tal afirmación y que los pondrá a disposición del fisco. Parece que su abogado ya se ha presentado donde corresponde para hacer la pertinente denuncia. Con la estratagema, pretende que sea Makoke quien cargue con parte de la deuda de 1.200.000 euros que tiene contraída con Hacienda.
Recordemos que Makoke también tenía problemas con el fisco que solucionó con lo obtenido en GHVIP. Una cantidad cercana a los doscientos mil euros. En el fondo del asunto, los celos. Y es que Kiko no lleva nada bien que su ex mujer se haya repuesto del varapalo que supuso conocer que dormía con el enemigo. Descubrió muchas cosas que ignoraba y que le hicieron despertar del sueño. Tras esto, optó por la separación.
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La opinión de Makoke sobre la jugarreta de Kiko
> Makoke es la primera que no se explica el comportamiento de Kiko. No entiende el porqué de tanta inquina y asegura no conocer al hombre con quien compartió veinte años de su vida. A pesar de los pesares, fuentes de su entorno afirman a Cotilleo que está tranquila y para nada derrumbada. Si acaso, centrada en recomponer su situación, complicada tras lo planteado por Kiko.
La prioridad de Makoke es sacar adelante un proyecto en el que lleva meses trabajando. Por otro lado, cuenta con el apoyo de sus hijos. Más que nunca, Javier y Ana están de su lado y no la dejan ni a sol ni a sombra. En cuanto a Tony Spina, es un quitapenas. Tampoco se plantea Makoke nada serio con él.
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Los verdaderos motivos de Kiko
> Todo indica que Kiko Matamoros se ha lanzado en tromba contra Makoke movido por los celos. Al parecer, no lleva nada bien que ella frecuente la compañía de quien le plazca dada su situación de soltería. En concreto, Kiko tiene entre ceja y ceja la presencia de Tony Spina en el que fue su domicilio conyugal. Ciertamente, se separó para ser libre y es todo menos eso, pues no se quita de la cabeza a su ex. Mientras tanto, Makoke hace su vida y sigue con su lema: “A otra cosa, mariposa”. No es mujer de mirar atrás. Lo que pasó, pasó y lo mejor está por llegar.
La estrategia iniciada por Kiko en relación a involucrar a Makoke en su problema con Hacienda puede no salirle bien. Está por ver si los documentos que aporta sirven como prueba para demostrar su versión de los hechos. Por otro lado, podría caerle una buena en el caso de que en el fisco decidan penar lo que se conoce como ocultación patrimonial. En esta cuestión, su ex mujer no piensa hacerle el caldo gordo. No va entrar en dimes y diretes. Sus allegados señalan que sea él quien alimente el peligroso juego que ha iniciado.
