María Teresa Campos, que ya tiene setenta y siete años, sigue esperando su proyecto televisivo en Mediaset. Cada vez que tiene la oportunidad, manifiesta a la cúpula de la cadena sus ganas de volver a presentar un nuevo programa. Sin duda, ella no pierde la esperanza.
Su método principal es la ironía. Las indirectas de la matriarca de las Campos se han convertido en costumbre. La última ha sido el pasado sábado, cuando entró por teléfono para apoyar a su hija Terelu. Os hablamos sobre su nuevo dardo a Mediaset y repasamos todas sus «pullitas» hacia sus jefes.
4Guardó un as bajo la manga, pero le salió mal la jugada
Como venimos diciendo desde hace ya casi un año… La que sueña con un espacio en Telecinco no consigue que Paolo Vasile y Mediaset confíen en ella de nuevo para llevar las riendas de un programa de televisión. Más sabe el diablo por viejo que por diablo, y es que la de Málaga tenia un as bajo la manga.
Esperaba que fuese ella quien presentara el nuevo espacio de Sonsoles Ónega, pero no ha sido así. Se barajó que María Teresa pudiese ser la sustituta de Sonsoles si la audiencia no respondía al espacio ofrecido antes de los informativos. Esta es la estrategia que tuvo la presentadora para regresar, de una vez por todas, a su querida televisión. No es la primera vez que vemos que María Teresa se niega a dejar paso a nuevos profesionales. Sabemos la enemistad que tiene con Toñi Moreno, precisamente a causa de la envidia.
