Las Campos han vuelto a la televisión y lo hicieron en la noche del martes, día previo a un festivo nacional. Paolo Vasile sabe que esta es la semana en la que menos se consume la televisión de todo el año. No obstante, no le ha importado, y más bien lo ha preferido, para darle así una lección a María Teresa Campos. Y la audiencia ha sido catastrófica. Solo un 10.8% de share, su mínimo histórico, quiso acompañar a esta saga familiar.
La presentadora está enfadada con Mediaset. No entiende por qué se ha tardado tardo en emitir el reality y no está de acuerdo con la fecha elegida para ello. Su tiempo delante de la pequeña pantalla podría tener los días contados. La venganza de la cadena contra María Teresa… a continuación.
Los peores tiempos para una grande de la comunicación
María Teresa Campos está viviendo los peores momento personales y profesionales. Cuando está superando un golpe viene otro que la hace más daño. A pesar de que ya hace bastante tiempo de sus problemas de salud, sigue teniendo miedo de qué la vuelva a pasar algo. Y ya no solo a ella, teme por sus hijas. La recaída de Terelu le ha afectado mucho y la ha tenido muy preocupada. Ella mejor que nadie sabe lo que es un cáncer. Y no quisiera por nada del mundo que sus hijas pasaran por ello.
Pero María Teresa sigue poniendo buena cara a la prensa. Pocas han sido las veces que la hemos visto enfadada o dirigiendo una mala contestación públicamente. Son muchos los años que lleva trabajando para la televisión y nadie mejor que ella sabe cómo hay que actuar. A la matriarca de las Campos no le queda otra que seguir esperando su ansioso espacio televisivo o aceptar que puede que haya llegado su fin mediático.
