El 17 de julio de 2017 es una fecha clave en la vida de Rocío Carrasco. Fue la última vez que pudimos ver públicamente a la hija de La Más Grande. Desde entonces, ha permanecido encerrada en el retiro de su casa al Norte de Madrid.
La situación aquel día fue todo menos agradable. Carrasco se acercaba hasta los juzgados de Alcobendas para declarar en relación a una demanda por incumplimiento de custodia contra Antonio David Flores. Allí se encontraba con su hijo pequeño, David, a quien decidió no saludar.
La relación con sus hijos
Rocío Carrasco es un personaje público. Famosa antes de nacer, no es de extrañar que viendo su paso por televisión, observando sus entrevistas en ‘Tómbola’, ‘¡HOLA!’ y otros tantos medios de comunicación, el público se pregunte qué ha sucedido realmente para que la relación entre Rocío y sus hijos en estos días sea inexistente.
Rocío Flores Carrasco, la primera hija del matrimonio entre Rocío y Antonio David, cumplía 21 años hace apenas unos días y no recibió la felicitación de su madre. No es nuevo, pues desde 2012 madre e hija no se dirigen la palabra. David Flores también puso rumbo a Málaga algunos meses antes de cumplir la mayoría de edad.
El hecho de que en su última estancia en casa de su padre decidiese quedarse para siempre, siendo aún menor de edad, hizo que Rocío interpusiese una demanda contra su exmarido por incumplimiento de custodia, denuncia que finalmente retiró pues con la mayoría de edad de su benjamín, ya no tenía sentido.
