La Casa Real británica, no ha tenido más remedio que confirmar lo que ni en los peores sueños de Isabel II ocurriría, ni siquiera en su año “horribilus”. Contra todo pronóstico y en contra a los usos y costumbres de la casa real británica, no ha tenido más remedio que emitir un comunicado que reza así…
Que en el español patrio viene a decir…
«Desde pequeño, el príncipe Harry ha sido consciente de la calidez que se le ha entregado por parte del público. Él se siente afortunado de tener a tantas personas apoyándole y sabe que tiene una vida afortunada y con privilegios. Él es también consciente de la curiosidad que causa su vida privada. No ha estado nunca cómodo con esta situación, pero ha intentado crearse una segunda piel para sobrellevar el interés que levanta. Él casi nunca ha tomado acciones contra las publicaciones sobre historias irreales que se escriben sobre él y ha trabajado muy duro para mantener una buena relación con la prensa, intentando focalizar su atención en su trabajo y las cuestiones que apoya.
Y para divulgarlo han tirado del perfil que Kensington Palace tiene en twitter. El motivo de saltarse todas las rígidas normas británicas y confirmar el hecho antes de que la relación se asiente, se debe al acoso que está recibiendo Meghan Markle, la novia oficial, que no confundir con “compromiso oficial”. Al parecer ha sido víctima, desde que su relación saltara a luz, de una ola de abusos y acosos, incluyendo calumnias sobre su persona en la página principal de un periódico nacional. Así como comentarios racistas, y sexistas, sobre todo en las redes sociales y web donde han viralizado algunas imágenes de la novia del príncipe Enrique de Inglaterra” en ropa interior e incluso mostrándose sinuosamente.
Esta difícil situación de manejar, y la imposibilidad del nieto de la reina para proteger a su novia, ha provocado que Kensington Palace, de un paso adelante y confirme la relación , con la intención de ser un corta fuegos alrededor de la pareja, y que puedan vivir su romance con absoluta normalidad, puesto que Meghan no tiene porqué sufrir los comentarios insidiosos sobre su vida anterior. El tiempo dirá si la relación se asienta y acaba con un final feliz.
Mientras tanto la pesada maquinaria de la Casa Real británica ya trabaja duro para sacar brillo al cuestionado presente de la que podría ser un nuevo miembro real, del mismo modo que otras casas reales, pusieron todo su empeño en dar luz y esplendor a los curriculums de los consortes regios.
